¿Qué es la viruela del mono sobre la que la OMS advierte?

La viruela del mono no cuenta con un tratamiento específico para combatirla.
La viruela del mono no cuenta con un tratamiento específico para combatirla, pero los que existen son eficaces.

Se trata de una es una enfermedad emergente de carácter zoonótico, es decir, que se transmite de animales a humanos.

Desde el 6 de mayo de 2022, se han detectado siete casos de viruela del mono en Reino Unido, según la agencia británica de seguridad sanitaria (UKHSA).

El primer caso detectado fue de una persona que había viajado recientemente a Nigeria, en África Occidental, donde esta enfermedades endémica-; los otros pacientes se infectaron en el Reino Unido, lo que hace temer una transmisión comunitaria.

“Estamos viendo transmisiones entre hombres que tienen relaciones sexuales con hombres”, lo cual es “una nueva información que debemos estudiar adecuadamente para comprender mejor la dinámica” del contagio, dijo Ibrahima Socé Fall, director general adjunto de la OMS para intervenciones de emergencia.

Síntomas

Los síntomas iniciales de la viruela del mono suelen ser fiebre, escalofríos, dolor muscular, dolor de espalda, dolor de cabeza, fatiga o inflamación de los ganglios linfáticos.

Tras un periodo de cinco días aparecen  lesiones en las mucosas de la boca, seguidas de erupciones que pueden aparecer en la cara y extenderse a otras zonas del cuerpo, afectando a las palmas de las manos y a las suelas de los pies. Las erupciones pasan por diferentes fases hasta convertirse en pústulas que contienen pus y, finalmente, generar una costra que cae al cabo de 14 días.

Transmisión de animales

Esta enfermedad es causada por un virus de viruela transmitido de los animales a los humanos; se contagia por contacto con una persona infectada o con sus fluidos corporales, incluida la saliva. La OMS ha detallado que el virus no se contagia “fácilmente” entre personas por lo que el riesgo para la población es “bajo”.

¿Existe una vacuna contra la viruela del mono?

La vacuna de la viruela ofrece una protección de hasta el 85% (según el CDC) <,lo que reduce tanto la transmisión o que la enfermedad sea grave.

A medida que la viruela se fue eliminando hasta alcanzar su erradicación, la vacunación contra la misma se fue deteniendo de manera progresiva. En el Reino Unido, por ejemplo, se retiró en 1971, en Estados Unidos en 1972 y en España en 1980. Por lo tanto, es posible que el porcentaje de la población adulta que ya recibió la vacuna de la viruela en su día goce también de cierto nivel de protección frente a la viruela del mono. (AVV)