Precio del crudo WTI cae por debajo del los $70 por primera vez desde 2021

Los temores por crisis bancaria en Estados Unidos, y las repercusiones en Europa, golpean la economía. Las expectativas de mayor demanda china no frenan la caída. El valor del petróleo ecuatoriano se ubica por debajo de lo presupuestado. 

El precio internacional del barril de WTI, que es el crudo de referencia para Ecuador, inició este 15 de marzo de 2023 con una caída por debajo de los $70. Este es el nivel más bajo desde 2021.

Esto es consecuencia de los temores por la crisis bancaria en Estados Unidos, y las repercusiones que podría tener en Europa. Al cierre de dos bancos estadounidense (Silicon Valley Bank y Signature Bank), se suman los malos resultados registrados en el Credit Suisse.

Las expectativas de una mayor demanda china no han podido frenar la caída del petróleo, que fluctúa entre $66 y $69 por barril. El mercado petrolero es sumamente volátil, explicó Carlos Morales, ingeniero petrolero, pero la tendencia a la baja puede complicar las finanzas públicas ecuatorianas.

Las mayores caídas vienen desde los últimos cuatro o cinco días y, en los niveles actuales, el precio del crudo ecuatoriano ya se cotiza por debajo de lo proyectado para el Presupuesto General del Estado (PGE) para 2023.

El ministro de economía, Pablo Arosemena, ubicó en el precio del barril en $65 por barril para este año. En los momentos actuales, y con un castigo de entre $4 y $5, el petróleo ecuatoriano ya fluctúa entre $62 y $64 por barril.

Esto quiere decir que el panorama tiene el riesgo de complicar las finanzas públicas, donde los ingresos petroleros, con el precio inicialmente presupuestado, deben aportar al menos $3.326 millones anuales para el PGE durante todo 2023.

Además, del total de ingresos por exportaciones petroleras, que entre 20% y 25% llegan al presupuesto estatal, también salen recursos para las preasignaciones a Gobiernos locales y universidades; las operaciones de la estatal Petroecuador; y la importación de los combustibles que se necesitan para el mercado interno.

Normalmente, las ventas del crudo ecuatoriano generan entre $10.000 millones y $14.000 millones al año.

Si la cotización baja menos dinero, afecta no solo se afecta al Gobierno Central y sus recientes ofrecimiento de más obra pública y gasto social, sino a amplios sectores de la economía nacional.

Hace menos de una semana, por ejemplo, el ministro Arosemena anunció más asignaciones a municipios, prefecturas y juntas parroquiales. Esto ya generó expectativas en las autoridades entrantes desde mayo de 2023; pero esas expectativas se puede transformar en reclamos si se tiene que reajustar a la baja los presupuestos.

El PGE actualmente supera los $31.000 millones y se proyecta un déficit fiscal (más gastos que ingresos) de $2.600 millones. Ese déficit puede aumentar por un menor precio del petróleo.

A inicios de 2023, ya se registró una caída de casi 15% en las exportaciones petroleras, tanto por la baja de la cotización con respecto a los niveles de 2022; como también por la paralización de los oleoductos durante más de una semana.

Solo en enero de 2023, de acuerdo con datos del Observatorio de la Política Fiscal, el ingreso petrolero al PGE fue de $39 millones frente a los $363 millones de enero de 2022. (JS)