El pago de la deuda pública sumará más de $32.200 millones entre 2024 y 2027 mientras las presiones por más gasto crecen

CARGA. Los ecuatorianos tendrán que trabajar para pagar más de $22,40 millones diarios de deuda pública entre 2024 y 2027.
CARGA. Los ecuatorianos tendrán que trabajar para pagar más de $22,40 millones diarios de deuda pública entre 2024 y 2027.

El año más complejo será 2026, cuando los intereses y amortizaciones superarán los $9.600 millones. Más del 70% de lo que tenemos que pagar se cocinó entre 2007 y 2019.

Cuando un hogar se endeuda para comprar un departamento, ahorra cada mes para pagar los intereses y amortizaciones del crédito. Cuando una empresa toma un préstamo de un banco, tiene que demostrar su capacidad de pago.

Sin embargo, según la explicación de Jaime Carrera, miembro del Observatorio de la Política Fiscal, las deudas del Estado están lejos de esas lógicas, pues se asume que las cuentas públicas son de todos y de nadie.

“La deuda pública es parte de nuestras vidas, cuya responsabilidad no asumimos. Este desdén lo pagamos con crisis de todo género, que niegan a todos las oportunidades de progreso”, puntualizó.

Más del 70% de las deudas que nos costarán pagos superiores a los $32.000 millones en los próximos 4 años, se cocinaron entre 2007 y 2019.

Durante el régimen de Rafael Correa, el déficit fiscal promedió más de $4.000 millones al año. A eso se sumó todo lo que se dejó de pagar al IESS, entre otras obligaciones pendientes.

Así, de un stock actual de deuda de más de $70.000 millones, un porcentaje cercano a los $50.000 millones se debe al despilfarro del boom petrolero correísta y la inercia del Gobierno de Lenín Moreno.

El resto se ha acumulado, desde 2020 a 2023, para salvar los muebles de la caída provocada por la pandemia, y para mantener una estructura de gastos insostenible desde la Constitución de Montecristi.

Pesada carga

A pesar de los esfuerzos del actual Gobierno por poner orden y frenar la vorágine del gasto, las presiones sociales, la demagogia y las emergencias harán que el déficit fiscal (más gastos que ingresos) aumente este 2023 de $2.600 millones (monto presupuestado) a al menos $4.000 millones.

Con eso, se retrocede en la reducción del déficit que se consiguió con esfuerzo durante 2022.

Eso provocará que las necesidades de financiamiento (nueva deuda) se disparen hasta alrededor de $10.000 millones. Parte de esa nueva deuda vendrá este 2023, a través del Fondo Monetario Internacional (FMI) con una línea de crédito de $1.000 millones, entre otros multilaterales y más endeudamiento interno.

El problema de que se desboque el déficit fiscal y el endeudamiento nuevo es que el país se queda sin espacio suficiente para pagar la pesada carga de la deuda pública anterior que se ha acumulado desde 2007.

Debido a la estructura inflexible del gasto público, a ingresos insuficientes y la volatilidad del ingreso petrolero, ya en 2023 las cuentas públicas se estremecen con el peso del pago del endeudamiento, tanto interno como externo.

Este año se logrará pagar más de $6.900 millones por los intereses y amortizaciones (pagos de capital) de la deuda.

Pero, en los próximos años, el peso se vuelve más difícil de manejar mientras las presiones, en algunos casos judiciales, exigen más gasto público bajo la premisa de que sí existen recursos; pero el Gobierno neoliberal de Guillermo Lasso no los quiere soltar.

Entre 2024 y 2027, sin tomar en cuenta otros compromisos, Ecuador debe pagar un total de $32.715 millones en intereses y amortizaciones de la deuda pública, tanto interna como externa.

El año más problemático será 2026, cuando el llamado servicio de la deuda llegará a los $9.619 millones. Ese monto representa seis veces más de lo que se presupuesta, por ejemplo, para bonos o ayudas sociales o tres veces el gasto promedio en salud.

El economista Carlos Romero puntualizó que, desde la Constitución de Montecristi, se implantó un modelo de desarrollo en el que se dispararon los derechos; pero nunca se pensó en las fuentes de financiamiento.

“El actual Gobierno se ha visto desbordado por las circunstancias y, en medio del canibalismo político, se vuelve a acumular muchos más gastos que ingresos. Eso significa hipotecar el futuro para seguir pagando deudas”, añadió.

‘Salir de la trampa’

José Rivera, analista de inversiones con cinco años de experiencia en el mercado de valores y partner oficial de Libertex, recalcó que Ecuador, en lugar de gastar de manera irresponsable, de una buena vez debería enfocarse en ser más competitivo, atraer inversión extranjera de largo plazo y apostar por las Alianzas Público-Privadas.

“No existen las soluciones mágicas, pero con una buena planificación, a cinco o diez años podríamos salir de la trampa del endeudamiento”, aseveró Rivera.

Mientras tanto, la economía ecuatoriana es la cuarta más riesgosa de América Latina, solo superada por Venezuela, Argentina y Bolivia.

Ecuador ya es el cuatro mayor deudor de FMI y seguimos extendiendo la mano por más ayuda. Solo entre 2024 y 2027, por intereses y amortizaciones, el país deberá pagar un total de $5.375 millones a ese organismo multilateral. (JS)

Entre 2024 y 2027, por intereses y amortizaciones de bonos y el 40%, de aporte estatal no desembolsado durante el correísmo, se debe pagar $5.792 millones al IESS.
En la década correísta se acumuló deuda cara de China, bonos y otras fuentes.
Hasta finales de 2023, cada mes faltarán más de $300 millones de ingresos frente a los altos gastos.

Pagos deuda pública

 
USD millones    
       
Año Intereses Amortizaciones Total
2024 2.622 4.920 7.542
2025 2.637 5.737 8.374
2026 2.464 7.155 9.619
2027 2.125 5.055 7.180

Pagos al Fondo Monetario Internacional (FMI)

USD millones    
       
Año Intereses Amortizaciones Total
2024 346 690 1036
2025 304 1.298 1602
2026 251 1.166 1417
2027 202 1.118 1320