En Ecuador los padres creen que golpear a sus hijos es parte del crecimiento personal

En octubre de 2022, un niño fue quemado por su madre, como castigo por romper un billete de 10 dólares.

El caso de una madre que golpea brutalmente a su hijo, en Tungurahua, no es aislado. La cifras estiman que 1 de 4 padres aplica castigos físicos a sus hijos. A eso se suma un estudio en el que los progenitores consideran que golpear a los hijos es parte de su crecimiento personal.

Las imágenes de una madre agrediendo brutalmente a su hijo causaron el rechazo de los internautas. La mujer fue detenida, el 30 de enero de 2023, por maltrato infantil, en Ambato.

Magally Altamirano, jefa de Dinaf Tungurahua, indicó que el video circuló por medio de un chat comunitario, por lo que las unidades policiales y Dirección Nacional de Policía Especializada para Niños, Niñas y Adolescentes (Dinapen) se activaron para la localización y captura de la agresora.

Este sin embargo, no es un caso aislado. El 25 de octubre de 2022, un niño de 5 años fue quemado en los glúteos por su madre. La mujer habría hecho esto como castigo, ya que el pequeño había roto un billete de 10 dólares. El hecho se registró en Baños de Agua Santa. 

Y es que según el estudio ‘Crecer con violencia: Los Castigos Corporales Dentro del Hogar. Un estudio desde la Psicología y los Derechos Humanos´,el castigo físico con fines disciplinarios es una práctica común en los hogares ecuatorianos. «Se trata de un fenómeno tan naturalizado que muchos adultos incluso lo catalogan como “anécdotas” de la niñez y aseguran que gracias a ello son buenos ciudadanos», señala el documento, desarrollado por la Universidad Católica.

Ana Campuzano, psicóloga educativa, detalla que el castigo físico conlleva a  experiencias de dolor, miedo y desconfianza que hacen que el ser humano maltratado en su infancia replique esta experiencia. 

Tipos de castigo recurrentes

Según el estudio que se hizo mediante encuestas con padres de familia, los castigos más recurrentes son los correazos, las nalgadas, los jalones de oreja, los baños de agua fría. Los menos frecuentes, en cambio, son los roces con ortiga, los azotes con cabestros o varas, las patadas.

Según datos del Observatorio Social del Ecuador, los niños de menor edad, entre los cinco y 11 años son los más agredidos dentro del entorno en el cual crecen.

El estudio entrevistó a 114 personas de Quito, Guayaquil y Puyo entre 2016 y 2017: adultos, hombres y mujeres profesionales, entre 20 y 59 años, residentes en las zonas urbanas de las tres ciudades, de clase media y media alta.

De los 114 entrevistados, solo 11 personas (8 mujeres y 3 hombres) afirmaron a los investigadores que nunca recibieron castigos corporales en su infancia y adolescencia.

Sanción

El artículo 152 del Código Orgánico Integral Penal (COIP) estipula lo siguiente: «Si como resultado de las lesiones se produce en la víctima un daño, enfermedad o incapacidad de cuatro a ocho días, la persona que haya causado la lesión será sancionada con pena privativa de libertad de 30 a 60 días».

Si produce a la víctima un daño, incapacidad o enfermedad de nueve a 30 días, será sancionada con pena privativa de libertad de dos meses a un año. Si el tiempo es de 30 a 90 días, será sancionada con pena privativa de libertad de uno a tres años y si supera los 90 días, la pena será de tres a cinco años. (AVV)

 

TOME NOTA

Los golpes en los niños desembocan en ansiedad, depresión, diabetes, obesidad y baja autoestima.

EL DATO

El maltrato a los menores es violencia intrafamiliar y puede denunciarse en la Fiscalía.

 

 

Como contravención se procesa la salvaje golpiza a un menor en Ambato