Mirador de Guápulo está descuidado y parece basurero de cantina

El mirador tiene botellas y vidrios rotos que dañan su imagen turística.

Los moradores esperan que el Municipio intervenga en este sitio turístico. 

El Mirador de Guápulo tiene dos vistas: una hacia la iglesia considerada el primer santuario mariano, fundada en 1620. Y otra, a las botellas de licor, basura y grafitis. Este segundo escenario, dice Claudia Verdesoto, moradora, «es deprimente ya que es un lindo sitio turístico, pero sin intervención del Municipio».

El problema no es nuevo. Ya en 2016, se firmó un convenio para combatir la inseguridad, el consumo de alcohol en el espacio público y la falta de basureros. Esto último fue resuelto aunque no sirve de mucho.

El mirador de Guápulo, ubicado en las calles Rafael León y Stubel, sector de la González Suárez, es el punto de encuentro de jóvenes que, según los moradores, llegan a consumir bebidas alcohólicas de miércoles a domingo.

Los moradores hacen un llamado a la Empresa Pública Metropolitana de Aseo (Emaseo) para que envíe más personal de limpieza, pero también solicitan patrullajes a fin de que se imponga sanciones a los libadores. 

 

Los libadores llegan desde el miércoles a este sitio.

Insignias que no sirven

En agosto de 2020, el Concejo Metropolitano aprobó la declaratoria de Quito, como ciudad de escalinatas y miradores.

La resolución, en su artículo 3, dispone a la Empresa Pública Metropolitana de Agua Potable y Saneamiento (Epmaps), la Empresa Pública Metropolitana de Movilidad y Obras Públicas (Epmmop) que -en el ámbito de sus competencias- procedan con la recuperación y regeneración integral de las escalinatas y miradores de Quito como parte del espacio público, a fin de que sean espacios de circulación amigable y segura.

El arquitecto y paisajista, Rodrigo Badillo, destacó que la declaratoria pretende incluir a los habitantes. Mencionó que en el artículo quinto del documento llama a directivas de los barrios urbanos, rurales y demás organismos del Cabildo a organizarse para crear mecanismos de control, cuidado y limpieza de estos espacios.

«Se ha llegado al punto en pensar que son las autoridades las que deben cuidar. Pero los ciudadanos tenemos que apoyar este trabajo», señaló. (AVV)

 

Los grafitis también afectan al ornato del mirador de Guápulo.