La extradición del hijo del ‘Chapo’ Guzmán deja una lección para Ecuador

SEGURIDAD. La implementación de la figura de la extradición no violenta compromisos internacionales
SEGURIDAD. La implementación de la figura de la extradición no violenta compromisos internacionales

El Cosepe elevó al narcotráfico como amenaza a la seguridad del Estado, lo que obliga a las instituciones a reorientar sus acciones.

La inminente extradición a Estados Unidos de Ovidio, hijo del mexicano Joaquín el ‘Chapo’ Guzmán es un claro mensaje a los líderes y grupos delincuenciales responsables de los principales eventos criminales que han desatado la crisis en las cárceles y el terror en las calles de Ecuador.

Según información de la Policía Nacional, en Ecuador operan al menos 25 narcobandas, pero el país tiene un porcentaje bajo en la eficacia de la justicia criminal, y se ubica en el puesto 101 de 139 países, según el Índice del Estado de Derecho.

Los miembros de las bandas delincuenciales que son capturados en el país pagan condenas mínimas y salen con beneficios carcelarios, muchos de ellos a seguir cometiendo delitos.

A pesar que sus crímenes afectan a otras naciones, donde las penas suelen ser más duras, no pueden ser juzgados en esos territorios, pues desde la Constitución de 1945 Ecuador niega la extradición de ecuatorianos.

El informe de inteligencia de la Policía sirvió para que el Gobierno plantee que la extradición se apruebe en la consulta popular del 5 de febrero.  La segunda pregunta del referéndum constitucional señala: “La extradición de ecuatorianos está prohibida en todos los delitos, incluso aquellos relacionados al crimen organizado transnacional como el narcotráfico, tráfico de armas, trata de personas y tráfico de migrantes. ¿Está usted de acuerdo con permitir la extradición de ecuatorianos que hayan cometido delitos relacionados con el crimen organizado transnacional, a través de procesos que respeten los derechos y garantías, enmendando la Constitución?

Los requisitos

El Gobierno defiende el argumento de que la extradición es una herramienta para la lucha contra el crimen organizado, y esgrime que el país ha ratificado tratados de extradición con al menos 20 Estados (España, Papúa Nueva Guinea, Chile, Estados Unidos, Bélgica, Gran Bretaña, Suiza, Colombia, Bahamas, Brasil, Canadá, Pakistán, Uganda, Tanzania, Suazilandia, Kenia, México, Perú, Francia y Australia).

Respecto a si se afecta algún compromiso internacional del Ecuador al permitir la extradición de ecuatorianos, la opinión de la Cancillería es que  la implementación de la figura de la extradición no violenta compromisos internacionales existentes de Ecuador, siempre que se cumpla lo establecido en las convenciones de extradición de los que Ecuador es parte.

¿Cuáles son los requisitos para que proceda con la extradición? La extradición regulada de forma general prevé diferentes exigencias para que esta proceda según las circunstancias vinculadas al cometimiento del delito. Entre ellos, que la infracción que motiva la extradición haya sido cometida en el territorio del Estado requirente, que el delito por el que se solicita la extradición esté previamente recogido por la legislación tanto del Estado requirente como del requerido, dijo Karen Sichel, secretaría jurídica de la Presidencia de la República.

El Consejo de Seguridad Pública (Cosepe) elevó al narcotráfico como amenaza a la seguridad del Estado, lo que obliga a las instituciones a reorientar sus acciones.

¿Quiénes son extraditables?

Mario Pazmiño, exjefe de Inteligencia del Ejército, explicó que para que una persona sea calificada como extraditable se necesita que sea requerida por la justicia de otro país y que haya cometido un delito en su territorio o tenga un proceso judicial. “Para que sea extraditado tiene que haber cometido una infracción en ese país y que se esté juzgando en ese país”. Recordó que en el caso de Colombia, todos los extraditables -sin excepción- eran requeridos por la justicia norteamericana porque estaban en el negocio del contrabando de cocaína hacia Estados Unidos. (SC)

El caso de Ovidio Guzmán

Luego de la captura de Ovidio Guzmán, hijo de Joaquín ‘Chapo’ Guzmán,  la encuestadora Poligrama de la ciudad de México, difundió un sondeo que reflejó que el 31,45% de los mexicanos consideraron que la seguridad en el país mejorará, mientras que el 21,43 % dijo que seguiría “igual de bien”.

Por el contrario, el 21,54% opinó que la situación empeorará y el 25,58% que seguirá “igual de mal”. De este modo, más de la mitad de los encuestados (52,88%) creyeron que habrá una relación positiva entre el arresto de Guzmán y la seguridad, mientras que el 47,12% mantuvo lo contrario. Pese a que en este campo las opiniones estuvieron parejas, una amplia mayoría, el 78,13%, se mostró a favor de la detención de Guzmán, uno de los hijos del histórico narcotraficante mexicano más buscado por Estados Unidos, mientras que el 21,87% lo rechazó. Ovidio Guzmán fue detenido la madrugada del pasado jueves en Sinaloa en un operativo de las Fuerzas Armadas y posteriormente trasladado a Ciudad de México, donde ingresó en prisión. (EFE)