Desde 2022, las muertes por ataques con armas de fuego son la segunda causa de muerte en ecuatorianos. Antes de ese año, la neumonía ocupaba ese lugar.
¿De qué mueren más los ecuatorianos? Las estadísticas detallan un centenar de causas, aunque las primeras tienen que ver con enfermedades y la violencia criminal.
Los datos del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC) detallan que, históricamente, la principal causa de muerte es el infarto agudo de miocardio (12.795 casos en 2023).
Desde 2022, la segunda causa de muerte tiene que ver con disparos con arma corta (4.493 casos registrados en 2023). En años pasados, la segunda causa de muerte, entre ecuatorianos, era la neumonía y los ataques con arma ni siquiera aparecían en las primeras posiciones. Ahora, sin embargo, hay otra categoría: muertes por disparos con armas de fuego no especificadas (1.367 casos en 2023), que si se suman a las de agresiones con arma corta dan un total de 5.860 casos en 2023.
Más niños mueren por ataques armados
Solo en 2024, el Ministerio de Interior registró la muerte violenta de 403 menores entre 1 y 17 años. Esto significa un aumento en comparación con el año 2023, cuando hubo 352 homicidios a menores. Esto significa un incremento del 14,4%, en muertes por armas de fuego contra niños y adolescentes.
Todo esto concuerda con que 2024 haya sido el segundo año más violento para el país, y el primer lugar lo ocupe el 2023.
Más femicidios con armas de fuego en Ecuador
El creciente uso de armas de fuego en Ecuador se nota en todos los ámbitos. Por ejemplo, según Fundación Aldea, en 2024 hubo 274 femicidios, el 62% de estos crímenes se cometió con un arma de fuego, antes eran las armas blancas (cuchillos) las más usadas.
Los datos de esta fundación detallan que los femicidios con armas de fuego van en crecimiento:
- 2019: 8 femicidios con armas de fuego.
- 2020: 9.
- 2021: 48.
- 2022: 67.
- 2023: 67.
- 2024: 62.
Ecuatorianos compran armas hasta por internet
La Policía Nacional indica que el 84% de las muertes violentas que ocurren en Ecuador se comete con armas de fuego. Hasta 2020, el porcentaje era del 60%. Es decir, que hay un auge del uso de pistolas, fusiles y otras armas de fuego.
El estudio ‘Caracterización del Crimen Organizado’, realizado por el Observatorio Ecuatoriano de Crimen Organizado (OECO), señala que hay más muertes violentas porque hay cada vez más acceso a armas de fuego. Además, el país no ha podido contener el ingreso ilegal de armamento. “El tráfico de armas y la evolución de las muertes violentas, en su mayoría tienen relación con el narcotráfico”, destaca el informe.
Utilizando correos paralelos o perfiles falsos, los criminales de grupos ligados al narcotráfico piden armas a través de Temu. Así lo asegura la Policía Nacional.
Esta no es la única forma en la que los delincuentes forman sus arsenales. También han acudido a la tecnología para imprimir fusiles, pistolas, ametralladoras y más, en 3D.
Desde la Policía Nacional indican que no solo hay facilidades para armarse, sino que estas formas dificultan el rastreo de las armas utilizadas en un crimen. “Como llegan por partes, el número de serie del arma queda distinto, lo que no permite determinar el origen (hacer la trazabilidad)”, señalan en la institución.
9 de cada 10 muertes violentas se cometen con armas de fuego
Nueve de cada 10 personas en Ecuador (87,9%) son asesinadas (muertes violentas) a causa de un disparo de arma de fuego. La data se desprende de un estudio desarrollado, con corte a diciembre de 2024, por la coordinación general de investigación del Instituto de Altos Estudios Nacionales (IAEN), en coordinación con la Fundación alemana con sede en Ecuador, Friedrich Ebert Stiftung (FES).
Carla Álvarez, coordinadora general de investigación del IAEN, en una entrevista con LA HORA, informó que los niveles de violencia se han tornado “epidémicos” y esta es una cifra “que se ha ubicado en el límite de lo inimaginable, tolerable y podría empeorar”, alerta.
Ecuador facilitó proliferación de armas justo en el momento de mayor auge criminal
La tasa de muertes violentas es «altísima» si se compara con lo que ocurre en el resto del mundo y específicamente en el continente americano, señala.
Alrededor del mundo, el 45% de las muertes ocurren con armas de fuego, y en América Latina, el 75%. “Es decir, somos el continente donde se registra la mayor cantidad de violencia armada por sobre Asia o África, como continente registramos más violencia”.
La catedrática del IAEN comparó al continente americano como un “barrio peligroso”, donde los ecuatorianos están inmersos en los mayores indicadores de violencia. “Son indicadores, por decir lo menos, muy escandalosos”, añadió.
Según Álvarez, Ecuador ha pasado de tener una política restrictiva con el mercado de armas, a flexibilizar la política, lo cual tiene impacto sobre la violencia y más aún si no se toman medidas control suficientes y adecuadas.
La necesidad de reducir la proliferación y controlar apropiadamente el uso de armas, es una discusión que el IAEN y la Fundación alemana buscan poner sobre la mesa para que los tomadores de decisiones estén mejor informados.
Si bien el departamento de Control de Armas del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas otorga el permiso para el porte de armas, Álvarez sostiene que existen requisitos intermedios como no tener antecedentes de violencia, certificado de capacitación y de no consumo de sustancias.
Considera que las FF.AA. deben estar pendientes de todo el proceso, que va desde la entrega de un permiso de porte se cumpla en base a los tiempos y parámetros adecuados, y hacer un seguimiento exhaustivo para que las personas que tienen un permiso de porte hagan un uso adecuado del mismo.
Esto, a su criterio, significa que las armas no sean transferidas a usuarios no autorizados (como bandas criminales) o no sean utilizadas en actos de violencia.
El uso de armas de fuego por parte de las empresas de seguridad privada también debe ser estrictamente regulado y controlado, para evitar que las organizaciones criminales utilizan a estas empresas como fachada para acceder legalmente a las armas.
Según Álvarez, actualmente, hay fuertes indicios de que hay un crecimiento de este delito en el país. Para combatirlo, se requiere que el Estado cuente con una política criminal, que utilice su aparato de inteligencia y sus organismos de control para erradicarlo.
En Ecuador no existe una política de desarme
Álvarez explicó que la política de desarme tiene que ver con la posibilidad de retirar el exceso de armas que existe en una sociedad a través de la recompra o pedirla a cambio de la entrega de bonos, por ejemplo, para la compra de alimentos.
Según la catedrática del IAEN, esto debe estar acompañado de una campaña de comunicación que aliente a la solución pacífica de conflictos, construcción de la paz, fortalecimiento del tejido social, y añadir un componente para dejar de lado el uso de juguetes bélicos. Reconoce que estas iniciativas no son continuas y son esporádicas en el tiempo por razones técnicas.
Ecuador es un país que no cuenta con políticas de desarme y ha pasado por alto este debate en la sociedad, dice la docente del IAEN. Esto es diferente en naciones como Brasil o Argentina, donde se han dado movilizaciones sociales orientadas a reducir la proliferación de armas en la sociedad.
Carla Álvarez, llama la atención al próximo Gobierno a priorizar la política de seguridad, para que sea permanente y vaya monitoreando los impactos. Es necesario entender, agrega, que el control de la violencia también pasa por el control y la disponibilidad de armas en la sociedad, y controlar el tráfico de armas para reducir la violencia. (AVV-SC)
“Somos el continente (América) donde se registra la mayor cantidad de violencia armada por sobre Asia o África, como continente registramos más violencia”, Carla Álvarez, coordinadora general de investigación del IAEN.
“Si no exigimos más controles (de armas), vamos a seguir muriendo, y la gente que nos rodea”, Carla Álvarez, coordinadora general de investigación del IAEN.
Principales causas de muerte en Ecuador en 2023
Infarto agudo de miocardio: 12.795 muertes
Agresión con disparo de arma corta: 4.493
Accidente de vehículo: 3.248
Neumonía, organismos no especificados: 2.839
Diabetes mellitus Tipo II: 2.167
Diabetes mellitus no especificada: 1,845
Fibrosis y cirrosis del hígado: 1.828
Tumor maligno del estómago: 1.782
Hipertensión: 1.521
Otras enfermedades pulmonares: 1.513
Enfermedad renal: 1.430
Agresión con disparo de armas de fuego no especificadas: 1.367
Fuente: INEC