El Gobierno de Lasso asegura que lo apuesta todo a una nueva ley de inversiones, pero se hace autogol cometiendo los mismos errores del pasado

HECHO. Virgilio Saquicela y Fabián Pozo anunciaron acuerdos entre Gobierno y Asamblea para una nueva Ley de Inversiones.
HECHO. Virgilio Saquicela y Fabián Pozo anunciaron acuerdos entre Gobierno y Asamblea para una nueva Ley de Inversiones.

El proyecto es una copia de la anterior iniciativa que fue rechazada por la Asamblea en marzo de 2022.

Julio José Prado, ministro de Producción, comercio exterior, inversiones y pesca, explicó, durante un reciente conversatorio con medios, que una mayor inversión privada, tanto nacional como extranjera, está directamente relacionada con que se concreten cambios legales que impulsen las zonas francas en el país.

“Esperamos poder ingresar una nueva ley de inversiones a la Asamblea próximamente. Hay un consenso  político previo. Esperamos que con esa nueva ley de inversiones podamos terminar de cubrir varios de los temas que en la Ley de Desarrollo Económico (reforma tributaria) no se consiguieron. Por ejemplo, temas relacionados con zonas francas, en donde la inversión Extranjera podría rápidamente multiplicarse como sucedió en Uruguay, en Costa Rica, en República Dominicana”, dijo.

Así, en el discurso, el Gobierno parece tener claro que sus principales metas económicas dependen de que la Ley de Inversiones esta vez sí sea aprobada en el legislativo, pero ahora sin ninguna referencia a las Alianzas Público-Privadas, las cuales son asumidas como privatizaciones por sectores políticos y sociales de oposición.

Sin embargo, más allá de los grandes anuncios de que se ha trabajado una nueva propuesta entre Gobierno y Asamblea; y de que las cosas no terminarán con una negativa tajante como en la de marzo de 2022, la realidad apunta a que se siguen cometiendo los mismos errores.

Sonsoles García, experta en zonas francas y docente universitaria, explicó que existe un cortocircuito entre los ministerios y lo que está pasando en la Presidencia de la República, donde se cocinan y negocian las leyes. Eso, justamente, ha provocado que el intento por resucitar la Ley de Inversiones tenga más problemas que soluciones.

“El proyecto que se está trabajando ahora, y que sé que lo va a presentar como económico urgente, es el mismo proyecto que ya la Asamblea dio de baja. Tiene los mismos artículos, las mismas falencias, los mismos errores. El Gobierno no tiene nada para negociar”, puntualizó.

Tozudez e intereses

Roberto Macías, mediano empresario en el sector del comercio exterior, aseveró que el problema de fondo es que todo queda en manos del presidente Lasso, sus asesores y personas más cercanas.

“Ahí se toman realmente las decisiones y se cometen los peores errores como la ya famosa llamada fallida entre Lasso y Correa. Lamentablemente no se dejan ayudar por los buenos expertos que hay en el país. Se puede decir que hay cierta tozudez en el círculo cercano de Carondelet, que incluso cree que sabe todo. Sé que, al inicio del Gobierno, con apoyo de expertos nacionales y extranjeros, se entregó al Ejecutivo una propuesta de Ley Orgánica de Zonas francas, pero esa propuesta se desvirtuó y se metió en una fanesca con otras muchas cosas en la fallida primera Ley de Inversiones”, contó.

García recalcó que no es cuestión de que primen egos o intereses, sino que se construya el mejor proyecto para el bien del país. Los que pierden si no se construye una normativa efectiva no son Lasso y sus ministros, sino el país en su conjunto en términos de empleo, producción, crecimiento y desarrollo.

Actualmente, luego de la aprobación de la reforma tributaria en Colombia, las oportunidades para atraer inversiones en zonas francas se multiplican para Ecuador.

Además, en la mayoría de los países de la región, en el contexto de la crisis mundial, existe una tendencia a cerrar las economías, por lo que una buena Ley de Inversiones podría poner a la economía ecuatoriana como un destino interesante, solo por detrás de Uruguay.

“No voy a señalar personas ni dar nombres porque creo que la prensa se ha encargado de hacerlo, pero creo que se están cometiendo los mismos errores de la anterior Ley de Inversiones. Se utiliza al mismo equipo de gente. Claramente no son personas expertas y claramente tienen intereses por sus clientes o por lo que sea”, afirmó.

Esta forma de actuar riñe con lo que Guillermo Lasso ha ofrecido desde el inicio: trabajar con los mejores expertos en cada tema y socializar para tener las mejores políticas públicas.

Propuesta insuficiente

Según estimaciones internacionales, por cada $1 que se deja de recibir en tributos locales y de comercio exterior, a través de exenciones y exoneraciones tributarias y aduaneras en zonas francas, se generan al menos $4 en la economía del país

Es decir, al final el impacto en la actividad y la liquidez en la economía es mayor; pero el Gobierno ha retrocedido en muchas de esas exenciones y exoneraciones por una visión más fiscalista de recaudación inmediata.

Por otro lado, la nueva propuesta de Ley, de acuerdo con Giovanna Robalino, investigadora en temas de comercio exterior, se queda mucho en las generalidades y deja demasiadas cosas a la discrecionalidad de la autoridad de turno.

“Hoy está Lasso, que es un presidente con enfoque en el libre comercio, pero mañana puede ser otro con una visión opuesta. Los inversionistas necesitan garantías de que sus inversiones tendrán seguridad jurídica y reglas claras sin cambios por muchos años”, aseguró.

Por su parte, García afirmó que la “nueva propuesta” que ha planteado el Gobierno no recoge todas las necesidades del régimen de zonas francas y han dejado de lado cosas importantes.

Por ejemplo, se establece el requisito obligatorio de una calificación del Ministerio de Economía y Finanzas. Esto no sucede en ninguna parte del mundo, ni siquiera en China

Tampoco se están poniendo temas claves sobre cómo serán las desgravaciones del Impuesto a la Renta, como va a ser el IVA en compras locales.

En el tema del almacenamiento, no se corrigen trabas de la normativa vigente como la prohibición de tener almacenamiento permanente de mercancías en zonas francas.

“Si no tienes eso dejas al régimen desnudo. En logística, si quieres hacer un hub de una farmacéutica, por ejemplo, necesitas poder manejar el almacenamiento de inventarios. La norma queda muy general, y en ciertos aspectos queda muy pequeña para todo lo que se puede hacer. No se están tomando las medidas necesarias para manejar un régimen de esta envergadura”, puntualizó García. (JS)

El Gobierno asegura que la Inversión Extranjera cerrará en $1.200 millones en 2022, pero el monto se podría duplicar desde 2023 en adelante con la Ley de Inversiones.
Además de zonas francas, la Ley de inversiones incluye cambios en temas de transformación digital y mercado de valores.