La minería ilegal sigue sin control en Buenos Aires, Imbabura

Solo en lo que va de 2022 se han incautado más de 4.000 sacos de material mineralizado de origen ilegal.

Nuevamente la parroquia Buenos Aires, del cantón Urcuquí, provincia de Imbabura, vuelve a ser el epicentro de la minería ilegal.

Durante un operativo de reconocimiento y vigilancia, en los sectores de Mina Vieja y El Cristal, elementos del Ejército incautaron: ocho cambuches, siete motores de luz, ocho poleas, 10 bocaminas y 1. 200 bultos de material mineralizado.

En lo que va del año los decomisos superan los 4.000 sacos de material mineralizado extraído de manera ilícita en esta parroquia, además de herramientas y explosivos encontrados en los frentes ilegales.

Según Fernando Benalcázar, exviceministro de Minas, «esta es la triste realidad de no contar con recursos económicos que permitan que los procesos de control sean sostenibles. El retorno de grupos estructurados, solventes y efectivos de la minería ilegal se concreta».

Además, puntualizó que Buenos Aires es un ejemplo cercano a Quito, pero en el Suroriente las actividades ilícitas son un problema diario; y no se ven acciones para frenarlo.

En abril de 2022, Diario La Hora ya reportó que tres años después del gran operativo para desmantelar un gran campamento de mineros ilegales (más del 10.000 personas), la situación continúa; incluso, han aumentado constantemente las denuncias de presencia de grupos de personas que se dirigen a los lugares de explotación del oro.

Los moradores tienen recelo y miedo de topar el tema, pues saben que quienes se dedican a este tipo de actividades ilegales manejan mucho poder económico. Algunos se atreven a hablar y cuentan que desde aproximadamente mediados de 2021 han sido testigos del incremento de grupos que intentan extorsionarlos, amedrentarlos y silenciarlos para que no denuncien a quienes ocupan sus terrenos para explotar ilegalmente el oro.