Ecuador necesita al menos 21 años para llegar al actual ingreso por habitante de países como Panamá o Costa Rica

ESTANCAMIENTO. La economía nacional no genera suficientes empleos y oportunidades.
ESTANCAMIENTO. La economía nacional no genera suficientes empleos y oportunidades.

El crecimiento económico de 2021 y 2022 ha sido un paso en la dirección correcta; pero se necesita más inversión, competencia y apertura comercial para acelerar el desarrollo.

En la cabeza de gran parte de los ecuatorianos está presente la pregunta de por qué los salarios son tan bajos y las oportunidades tan escasas dentro del mercado laboral.

La razón de fondo es que la economía nacional, luego de la época llamada como de dolarización de mercado (2001 a 2006), se volvió sistemáticamente improductiva, con altos costos para hacer negocios, creciente burocratización e informalidad, poca apertura comercial y poca competencia.

En última instancia, todo este escenario ha hecho que, después del espejismo del boom petrolero entre 2010 y 2014, la producción y la generación de riqueza se haya desplomado incluso antes de la pandemia.

Entre 2014 y 2019, el ingreso por cada ecuatoriano o el llamado Producto Interno Bruto (PIB) per cápita se redujo de casi $6.500 a menos de $6.100 anuales; y con el golpe de la COVID-19 se hundió a $5.600 en 2020.

La recuperación económica de 2021 mejoró un poco la situación hasta los $5.800.

Actualmente, incluso con las cifras récord de ventas en 2022, en el mejor de los casos, el ingreso por ecuatoriano puede llegar a $6.000 anuales.

Con ese nivel tan bajo como punto de partida, y asumiendo que se puede sostener un crecimiento del 3% anual del PIB, al Ecuador le tomará al menos 21 años duplicar su riqueza e igualar los actuales niveles de países de la región como Panamá y Costa Rica.

“A este ritmo, las siguientes dos generaciones no gozarán de una economía dinámica capaz de generar oportunidades y bienestar”, puntualizó Alberto Acosta Burneo, economista y editor de Análisis Semanal.

Lasso cambió la tendencia

Entre 2021 y 2022, la economía ecuatoriana ha crecido un 4,2% y un 3%, respectivamente. Este es un cambio radical con respecto al promedio de 0,5% de crecimiento entre 2015 y 2019.

Sin embargo, el esfuerzo es insuficiente, incluso si se repite un 3% de incremento en 2019. Con eso, el país apenas recuperará los niveles de 2018, pero asentado en pocos sectores

Acosta Burneo explicó que se prevé que para este año, los sectores más dinámicos van a ser los de minería y petróleo, con una expansión del 7,2 %, pesca con 5,9 % y camarón con 5,5 %. El resto tendría un crecimiento inferior al promedio de la economía.

La economía ecuatoriana crece lentamente por insuficiente inversión. Ya en el tercer trimestre se registró un crecimiento de la inversión del 1%; las exportaciones se frenaron con un aumento de 0,1%; y todo el impulso vino del consumo interno de los hogares.

El ambiente de crispación política, en medio de las próximas elecciones seccionales, juega en contra del Gobierno. Se han despertado las amenazas de paralizaciones desde la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie), ahora bajo el pretexto de la lucha antiminera.

Esto a pesar de las múltiples concesiones que han hecho las autoridades desde el paro violento de junio de 2022. Entre esas está la no apertura del catastro minero que, de acuerdo con Carolina Orozco, de la empresa Torata Mining, ha impedido que se concreten inversiones en el sector.

Al menos 13 empresas de media y gran minería estarían pendientes de 91 concesiones.

Esa misma incertidumbre se replica en otros sectores de la economía, en los que las inversiones se hacen en menores niveles de lo que se podría, y con varias dudas sobre el futuro del país.

Tratados comerciales

Para darle un impulso adicional al país, el Gobierno de Guillermo Lasso ha ofrecido que en febrero de 2023 se firmará el tratado comercial con Costa Rica y en marzo de 2023 se hará lo mismo con China.

Además, se continuará con las negociaciones con Corea del Sur y se añadirán procesos de apertura comercial con Canadá, Panamá, República Dominicana y Singapur.

Asimismo, también se ha ofrecido continuar con la reducción del Impuesto a la Salida de Divisas (ISD) y bajar el Impuesto a los Consumos Especiales (ICE) para varios productos y sectores, entre ellos la importación de armas.

Por otro lado, de acuerdo con el ministro de Producción, Julio José Prado, el Gobierno insistirá en enviar una Ley de Inversiones a la Asamblea, pero enfocada en las zonas francas.

Sin embargo, Acosta Burneo considera que cualquier medida será poco efectiva si no se transforma radicalmente el entorno para invertir en el país.

Para eso se necesita garantizar la seguridad jurídica y respeto al Estado de derecho; eliminar trámites innecesarios y barreras de entrada a nuevos inversionistas; adoptar una legislación laboral moderna; permitir la competencia internacional en el mercado financiero y liberar el flujo de capitales.

“En resumen, copiemos lo que ha funcionado en el mundo desarrollado. La verdadera interrogante es: ¿estamos dispuestos a impulsar este cambio?”, cuestionó.

Tanto las reformas en temas como el laboral y de inversiones, como la aprobación de los tratados comerciales, deben pasar por la Asamblea; pero la actual mayoría de oposición no es confiable para el Gobierno ni para el país.  (JS)

Actualmente, la economía ecuatoriana produce, en promedio, $500 por trabajador al mes; pero para el costo por trabajador formal supera los $600.
 Ecuador necesita un crecimiento de entre el 4,5% y 5% del PIB durante varios años para generar más empleo y aumentar los ingresos de sus habitantes.
$5.800 anuales es el ingreso por habitante en Ecuador. En Perú y Colombia está en los $7.000 anuales.