GPS de un auto sirve como ruta de búsqueda de María Belén Bernal

Espacio. Guápulo fue el nuevo punto de búsqueda de la Policía, Fiscalía y Bomberos.
Espacio. Guápulo fue el nuevo punto de búsqueda de la Policía, Fiscalía y Bomberos.

Los operativos siguen sin dar resultados del paradero de Bernal, ni del principal sospechoso de su desaparición, German Cáceres.

Equipos de investigación e inteligencia trabajan en la búsqueda de María Belén Bernal, así como de su esposo, German Cáceres, prófugo y principal sospechoso de la desaparición de la abogada de 34 años quien fue vista, por última vez, el 11 de septiembre de 2022, en la Escuela Superior de Policía (norte de Quito).

Fausto Salinas, comandante general de la Policía Nacional, señala que utilizan la línea de tiempo de los lugares que Cáceres recorrió, entre el 11 y 12 de septiembre, desde la Escuela Superior de Policía hacia las áreas aledañas. “Ahí nos da algunos tiempos y en los rangos de esos tiempos que puede movilizarse en un vehículo es precisamente lo que estamos buscando. Por ejemplo, hay una salida (del vehículo de Careces), que dura unos 40 minutos y ahí medimos hasta dónde pudo alcanzar en esos minutos, 20 de ida y 20 de regreso”, dijo Salinas.

En ese lapso, Cáceres también hizo llamadas. Es así que el auto marca Great Wall, tipo Jeep, ha sido una pieza clave para los perímetros de búsqueda. El auto, en el que solo se vio salir a Cáceres, está bajo custodia, pues se conoce que ahí también se encontraron manchas de sangre, igual que en la habitación del teniente.

Salinas señaló que se ampliara el rango de búsqueda, fue así que, el 20 de septiembre de 2022, llegaron a Guápulo, Gualo y el parque Jerusalén.

Con el paso de los días, la Fiscalía sigue recabando indicios y tomando testimonios sobre lo sucedido en la habitación de Cáceres, la última vez que Bernal fue vista.

Las versiones de los cadetes coinciden en que se escucharon gritos y golpes, lo que apunta a que la abogada, madre de un menor de 13 años, fue víctima de violencia en el interior de la Escuela Superior de Policía.

Inclusive, la única procesada, hasta el momento, una cadete de 24 años, quien tiene prisión preventiva, testificó que Cáceres le dijo que se quede tranquila porque en el área de las habitaciones de los oficiales, no había cámaras. También le pidió borrar las conversaciones telefónicas, entre ambos.

Policías suspendidos 

Patricio Carrillo, ministro del Interior, calificó el hecho como una “vergüenza” para la institución y la sociedad. También anunció una depuración que inició con la suspensión de 12 servidores policiales que habrían tenido algún grado de participación, durante lo ocurrido en la Escuela Superior de Policía. También hay quienes cometieron omisiones, como no haber registrado ingresos y salidas.

En uno de los testimonios de los cadetes se destaca que el teniente Cáceres les pidió no registrar la entrada de Bernal, su esposa. El teniente, según su misma versión, antes de desaparecer, omitía sus funciones en la institución, pues declaró que pese a estar de guardia, salía a jugar futbol o salía a comprar el pan, pues desayunaba a mediodía. (AVV)

Un asesinato no es un “crimen pasional”

En medio de la conmoción social que ha causado la desaparición de María Belén Bernal, han proliferado las noticias falsas y discursos erróneos sobre la violencia de género.

En redes sociales se detallaron hechos que son falsos, por ejemplo, se habló del hallazgo del cuerpo de Bernal, quien mantiene estatus de desaparecida.

También han existido desaciertos como llamar al hecho ‘crimen pasional’. Lo que importa, más allá de las circunstancias de un hecho violento contra una mujer es la minimización de la violencia con discursos sobre homicidios conyugales a los que se califica como pasionales, un concepto que justifica la violencia alegando que “la pasión” justifica la violencia física o emocional.

El concepto de crimen pasional perpetúa la idea de que el criminal está actuando casi que, poseído por fuerzas exteriores, “amores inmanejables”,  pensar que la pasión es proporcional a perder el control produce cierta simpatía por el homicida y romantiza el crimen.

12 funcionarios policiales están suspendidos y con sumarios administrativos, por su presunta participación u omisiones en la desaparición de María Belén Bernal.
Los mandos de la Escuela Superior de Policía fueron cambiados tras la desaparición de la abogada.