El presidente Lasso, a través de su cuenta de Twitter, aseguró que el multilateral entregará a Ecuador el último desembolso por $700 millones antes del final de 2022. Además, recalcó que el manejo fiscal cuenta con la confianza internacional.
Lo que ha venido repitiendo el ministro de Economía, Pablo Arosemena, se concreta este 14 de diciembre de 2022. Ecuador cierra de manera exitosa el acuerdo de financiamiento que mantiene desde 2020 con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
A través de su cuenta de Twitter, el presidente de la República, Guillermo Lasso, dijo que » luego de 20 años, Ecuador finaliza con éxito un acuerdo con el FMI. $700 millones previstos en el PGE, que financian el sector social, serán desembolsados. Y esto, gracias a nuestro manejo responsable de las finanzas».
En otras palabras, el primer mandatario aseguró que el último desembolso pendiente llegará al país, debido a que se han cumplido las metas establecidas con el organismos multilateral. Entre esas metas están un déficit fiscal de alrededor de $2.200 millones, niveles altos de reservas internacionales y un manejo transparente de las deudas con entidades como el Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS)
«Este es el Ecuador del Encuentro: uno que cuenta con la confianza internacional porque sabe cómo administrar con eficacia y transparencia. Orden Fiscal y Enfoque Social», recalcó Lasso.
Sin embargo, hasta el momento el ministerio de Economía no ha emitido ningún comunicado oficial ni ha explicado cómo quedan temas que también estaban dentro de las metas con el FMI como la auditoría de los balances de Petroecuador.
Al momento, el stock de la deuda con el FMI ya suma $7.166 millones; pero con el último desembolso de $700 millones llegará a un total de $7.866 millones.
La mayor incognita se presenta para 2023. Luego de cerrado exitosamente el actual acuerdo, Ecuador deberá definir cómo será su relación con el FMI a futuro. El ministro Arosemena ha puntualizado que se realizarán conversaciones durante el primer semestre del próximo año.
El multilateral podría convertirse en una especie de aval para que otras instituciones le sigan prestando al Ecuador, debido a que, a pesar del ajuste fiscal, todavía necesitará financiamiento para cubrir el déficit fiscal y pagos de deudas anteriores.
Uno de los mayores lastres del ajuste fiscal, y el acuerdo con el FMI, es la caída en los montos para inversión u obra pública. Para 2023, se espera gastar un poco más de $1.800 millones desde el Estado; pero el Gobierno de Lasso sigue confiando que la inversión privada suplirá el resto de las necesidades de infraestructura desde el próximo año.
Sin embargo, según el Gobierno, gracias a la política económica gubernamental, respaldada por el FMI y otros organismos multilaterales, el Ecuador ha obtenido varios beneficios:
• En el 2020, antes del acuerdo con el FMI, solo 3 de cada 10 hogares vulnerables recibían bonos sociales. Ahora, son 8 de cada 1O familias necesitadas las que acceden a este beneficio.
• Para el próximo año se ha previsto en la Preforma del PGE la mayor inversión social de la historia: USD 15.200 millones.
• El déficit fiscal se ha reducido del 7 % del PIB en 2020, al 2,7% del PIB en este año, evitando seguir con ese agresivo endeudamiento público al que le sometieron al país en años pasados.
• Organismos internacionales proyectan un crecimiento económico de Ecuador del 2,7%, que está por encima del promedio regional (1,7%).
Luego de 20 años, Ecuador finaliza con éxito un acuerdo con el FMI. USD 700 millones previstos en el PGE, que financian el sector social, serán desembolsados. Y esto, gracias a nuestro manejo responsable de las finanzas.
— Guillermo Lasso (@LassoGuillermo) December 14, 2022
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