El país no supera el estándar Euro 2 (92 octanos); mientras en la región se tienen combustibles con al menos Euro 4 (95 octanos).
A través de un comunicado, la Asociación de Empresas Automotrices del Ecuador (Aeade), denunció que las autoridades nacionales no han tomado las medidas necesarias para cumplir con el ofrecimiento, pendiente desde hace varios años, de mejorar la calidad de las gasolinas en el país.
Actualmente, esas gasolinas se comercializan en el mercado interno con niveles de azufre que fueron prohibidos internacionalmente hace más de 20 años.
De acuerdo con la Aeade, el contenido de azufre en los combustibles es la principal causa de la contaminación del aire. Varios estudios científicos han demostrado que las partículas finas de azufre al ser inhaladas se hidratan con la humedad de las mucosas y provocan serios riesgos para la salud de las personas y los animales.
Entre las principales enfermedades están las respiratorias crónicas, el cáncer de pulmón y las afecciones cardíacas de todo tipo.
Los estándares internacionales recomiendan que los niveles de azufre no superen las 10 partes por millón (ppm). Para reducir al máximo posible los efectos sobre la contaminación atmosférica, Europa, Estados Unidos y otros países han establecido exigentes estándares de emisiones de los motores, que solo pueden funcionar con combustibles de muy bajo contenido de azufre.
En Ecuador, las normas y reglamentos del INEN permiten que los combustibles que se comercializan tengan hasta 650 ppm de azufre y , en el caso del diésel, incluso se permite que en ciertas zonas se llegue a 7.000 ppm.
«Combustibles como los disponibles en el país fueron prohibidos en Europa hace más de 20 años, cuando quedaron sin efecto las normas Euro 3, que lamentablemente todavía rigen en Ecuador. Es decir, nuestro país maneja estándares de calidad que están a décadas de la región europea, donde el estándar vigente es Euro 6.2,e inclusive de América Latina, donde la mayoría de países exigen un estándar de calidad Euro 5», puntualizó la Aeade.
Además de la negligencia ambiental y de salud púbica que supone mantener combustibles tóxicos, los propietarios de vehículos también son afectados, pues terminan afrontado de manera privada el desgaste y las reparaciones prematuras de los motores, fabricados para combustibles de calidad internacional.
De igual manera, las empresas se ven limitadas al momento de ofertar automotores de tecnologías más modernas y eficientes de bajas emisiones por la incompatibilidad con los combustibles disponibles de paupérrima calidad.
Incluso la gasolina súper, que es la más cara del país con precio liberado en alrededor de $4 por galón, no supera la calidad Euro 2 (92 octanos); mientras vecinos como Colombia y Perú tiene estándares Euro 4 (95 octanos).
Se necesitan acciones inmediatas
Aeade expresó su malestar porque ni el Ministro de Energía ni los representantes de Petroecuador hayan incumplido el compromiso público del Presidente de la República, Guillermo Lasso, con relación a poner a disposición de los ecuatorianos combustibles aptos para contar con tecnologías automotrices Euro 5, tal como lo dispuso el Decreto Ejecutivo 1158 de 2020.
Como acciones inmediatas el gremio automotriz propone que, a partir del segundo trimestre de 2022, el nuevo estándar de la gasolina Súper sea de 95 octanos, y desde enero de 2023 la gasolina Extra y Ecopaís sea de 89 octanos.
El plan de mejora la calidad de combustibles para el 2023, igualmente, debe incluir al diésel.
«Desde la Aeade y otros sectores preocupados por el bienestar delos ecuatorianos, exigimos a usted, señor Presidente, que tome acción directa sobre este compromiso que sus funcionarios no pudieron o no quisieron ejecutar», concluye el comunicado.
La calidad de combustibles en Ecuador es una de las peores de América Latina, afectando la salud de los habitantes y el ambiente. El Gobierno se comprometió a mejorarla, se debe ejecutar acciones concretas que impulsen el cambio que se requiere. pic.twitter.com/mvDOHJMjiK
— AeadeEc (@AeadeEc) February 22, 2022
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