Esto se sabe del derrame de petróleo en Esmeraldas y la falta de agua

La tubería que fue afectada ha sido reemplazada. El bombeo por el SOTE se retomará en los próximo días. (Foto: Petroecuador)

El derrame de crudo del 13 de marzo en Esmeraldas alcanza dimensiones críticas, afectando dos ríos y su fauna. Autoridades trabajan en contención, mientras miles de habitantes sufren impactos directos e indirectos.

El jueves pasado, alrededor de las 18:00, se registró un grave derrame de petróleo en la tubería principal del Sistema de Oleoductos Transecuatoriano (SOTE), en el sector de El Vergel, Quinindé. El incidente ha generado una emergencia ambiental en Esmeraldas, donde el río que abastece de agua a la ciudad ha sido afectado por la contaminación.

Cruz Roja proporciona agua segura a Esmeraldas tras derrame de petróleo

El alcalde Vicko Villacís ha alertado sobre los «daños ecológicos sin precedentes» y ha declarado la emergencia en la zona.

Emergencia declarada y medidas urgentes

El Comité de Operaciones de Emergencia (COE) cantonal declaró la emergencia en Esmeraldas el viernes, exigiendo a Petroecuador, la empresa estatal encargada del oleoducto, la implementación inmediata de barreras de contención y equipos de limpieza. Además, se solicitó un análisis constante de la calidad del agua y la contratación de camiones cisterna para abastecer a las zonas afectadas. Hasta el momento, Petroecuador ha atribuido el derrame a un deslizamiento de tierra causado por las intensas lluvias que han azotado la región en las últimas semanas.

Quinindé: miles de personas afectadas

El alcalde de Quinindé, Ronald Montero, ha alertado que alrededor de 15.000 ciudadanos están sufriendo dificultades para respirar debido a los gases emitidos por el crudo derramado. Además, el 75% de los afectados presenta problemas respiratorios, el 20% sufre laceraciones en la piel e infecciones, y un 5% ha reportado problemas estomacales. Aunque se han desplegado brigadas médicas, aunque faltan recursos.

Esfuerzos y críticas en Quinindé por respuesta

A pesar de que el Gobierno ordenó a Petroecuador implementar acciones urgentes y crear un fondo para la remediación ambiental y la reparación a las familias afectadas, las autoridades locales denuncian que la respuesta ha sido demasiado lenta. El alcalde Montero criticó la ausencia de las carteras del Estado en la zona y señaló que, tras cuatro días del derrame, «no se ha visto un contingente real» para atender las necesidades urgentes de la población.

Este no es el primer derrame de petróleo en la zona. En los últimos ocho años, se han registrado tres incidentes similares, incluido uno en 2023 causado por un deslizamiento de tierra. Montero destacó que las autoridades de Petroecuador conocen los puntos sensibles donde ocurren estos deslizamientos, pero no se han tomado medidas preventivas adecuadas. Además, el oleoducto tiene más de 50 años de antigüedad, lo que aumenta su vulnerabilidad.

El crudo se expande rápidamente

El derrame de petróleo en Esmeraldas, ha sido calificado como un desastre ecológico sin precedentes por ambientalistas e investigadores. Tras la rotura de una tubería del Sistema de Oleoducto Transecuatoriano (SOTE), el crudo se dispersó rápidamente por los ríos Viche y Esmeraldas, afectando comunidades como Mirador, El Vergel, Biche, San Mateo, y zonas costeras como Camarones, Coloque, Palestina, Rioverde y Bocana de Ostiones.

Derrame en el río Esmeraldas: suspenden agua potable, ríos y el mar en riesgo

La magnitud del derrame ha dejado dos ríos completamente contaminados: el Cable y el Viche, cuyas aguas están cubiertas por una capa de petróleo de 40 a 50 cm de espesor. Estudiantes e investigadores de la Universidad Católica de Esmeraldas confirmaron la muerte de la fauna acuática en los ríos afectados. Según los expertos, al menos 51 especies de peces están en peligro, y se estima que, incluso con trabajos de limpieza exhaustivos, la recuperación tardará más de un año. El crudo también ha llegado a las zonas costeras, afectando a comunidades pesqueras como Peñas Blancas, donde 109 familias dependen de la recolección de almejas. Además, el manglar Botoncillo, hogar de cientos de especies, ya muestra signos de contaminación, poniendo en riesgo moluscos, cangrejos y otras especies marinas.

Reserva ecológica en peligro

El derrame ha alcanzado la Reserva Ecológica del Estuario del Río Esmeraldas, un área protegida de 242 hectáreas de manglar que alberga 60 especies de aves y más de 100 especies migratorias. Este ecosistema también es hogar de 50 especies de peces de agua dulce, 30 especies de mamíferos, como el cuchucho, y reptiles como caimanes e iguanas. La almeja gigante, conocida localmente como «pino», única en los islotes del estuario, también está en riesgo. Los investigadores advierten que los daños serán más graves durante los primeros tres meses, y la recuperación total podría tardar años.

Reparación del oleoducto y estabilización del terreno

La maquinaria ha logrado estabilizar el terreno afectado, mientras se preparan los tubos de reemplazo, los cuales son perfilados y doblados para su instalación. Los técnicos esperan retomar el bombeo de petróleo este viernes, una vez finalizadas las reparaciones.

Miles de barriles de crudo se han recolectado en piscinas de contención para evitar que el petróleo siga avanzando hacia los ríos Cable y Esmeraldas. A 31 km río abajo, en Cuba, se concentra la mayor cantidad de petróleo derramado. Equipos especializados utilizan skimmers para separar los residuos vegetales contaminados. Desde el pasado jueves, se han retirado un promedio de 8 tanqueros diarios, cada uno con capacidad de 10.000 litros, para trasladar el crudo a piscinas prefabricadas y comenzar el proceso de limpieza, que se estima tomará varios meses.

Aunque no se tienen datos precisos sobre la cantidad derramada. Las autoridades han entregado bidones con agua y tanques de almacenamiento a los afectados, prometiendo abastecerlos mientras dure la emergencia. Muchos habitantes deben caminar kilómetros para conseguir agua, lo que ha agravado la situación en la zona.

Emergencia en Petroecuador para superar la emergencia

Petroecuador ha delegado a la Gerencia de Transporte la responsabilidad de ejecutar los procesos de contratación necesarios para superar la emergencia. Además, se ha instruido a las áreas de Exploración y Producción, Seguridad, Salud y Ambiente, y Logística a coordinar esfuerzos para resolver la situación. La Subgerencia de Finanzas está gestionando los recursos necesarios, mientras se realizan los procedimientos legales para contratar servicios de emergencia. Una vez superada la crisis, la empresa deberá presentar la documentación correspondiente para su publicación y evaluación.

El Ministerio del Ambiente, Agua y Transición Ecológica (MAATE) lidera una serie de acciones para mitigar los efectos del derrame de crudo.

Equipos especializados realizan los trabajos de remediación. Estos podrían durar varias semanas. (Foto: Cortesía)

Respuesta del Gobierno: garantizar el suministro de agua

En respuesta a la crisis, el viceministerio del Agua, bajo el liderazgo de María Luisa Cruz, ha establecido una hoja de ruta en conjunto con representantes del Oleoducto de Crudos Pesados (OCP), el alcalde de Esmeraldas, Vicko Villacís, y autoridades de Petroecuador.

Entre las medidas adoptadas, se destaca la utilización de una reserva de 35 millones de litros de agua almacenada en la planta de tratamiento San Mateo, la cual será distribuida mediante 50 tanqueros en las zonas afectadas. Además, se han identificado cuatro fuentes alternas de captación de agua en colaboración con la Cruz Roja Ecuatoriana. Estas fuentes serán potabilizadas para complementar la distribución de agua a través de tanqueros. Paralelamente, se han tomado muestras de aguas profundas en la Planta San Mateo, con el apoyo de buzos y laboratorios acreditados, para evaluar la viabilidad de reiniciar las operaciones de la planta.

Ayuda humanitaria y distribución de agua embotellada para los afectados

La EP Petroecuador ha sido encargada de supervisar la distribución de agua embotellada, asegurando que esta se realice de manera técnica y priorizando las necesidades de las familias afectadas. Asimismo, se ha elaborado un plan para identificar los lugares críticos donde la entrega de agua debe ser priorizada, como hospitales, camales, mercados y guarderías.

Los damnificados por el derrame han recibido agua embotellada para consumo. (Foto: Cortesía)

La presidenta del Comité de Operaciones de Emergencia (COE) Nacional, Inés Manzano, también ha participado activamente en las labores de remediación. Junto al gobernador de Esmeraldas y representantes de Petroecuador, Manzano entregó ayudas humanitarias a las comunidades de El Porvenir, El Roto y Achiote, cumpliendo con las directrices del presidente Daniel Noboa.

Ministra de Energía en territorio

La ministra de Energía, Inés Manzano, se pronunció sobre la situación en Esmeraldas, destacando el compromiso del Gobierno para enfrentar los desafíos en el sector energético y ambiental. Durante una visita a la provincia, Manzano afirmó: «Aquí en Esmeraldas necesitamos hablar con la verdad, y esta es: trabajamos y estamos preocupados, para contener, remediar y compensar».

Sus declaraciones reflejan la determinación del Gobierno en atender las problemáticas de la región, garantizando acciones concretas para mitigar los impactos y fortalecer el desarrollo sostenible.  El puente sobre el río Esmeraldas se ha convertido en el epicentro de una crisis ambiental tras un derrame fortuito ocurrido recientemente. Las imágenes muestran un panorama desolador, con aguas contaminadas que han afectado gravemente el ecosistema local. A pesar de las adversidades, las autoridades han asegurado que se están realizando esfuerzos significativos para contener el impacto y remediar los daños causados. Equipos especializados han sido movilizados para limpiar el área y evitar que la contaminación se extienda a otras zonas.

Lluvias intensas complican las labores de contención

Uno de los mayores desafíos en esta emergencia ha sido el clima. Las constantes lluvias han dificultado las labores de contención, ya que el agua arrastra los contaminantes a zonas más amplias. Sin embargo, el Ministerio del Ambiente ha reforzado sus acciones con el apoyo de organizaciones no gubernamentales (ONG) y ha iniciado un proceso de compensación a las comunidades afectadas. Estas comunidades han visto su entorno natural gravemente perjudicado, lo que ha generado preocupación entre los habitantes locales.

Las autoridades han enfatizado que no se escatimarán recursos para remediar el daño ambiental y compensar a las comunidades impactadas. Aunque el proceso es complejo, se ha asegurado que se están tomando todas las medidas necesarias para evitar que la contaminación se extienda aún más. (DLH)