Wilma Andrade: “No se puede caer en el juego de desestabilizar al país o ser cómplices de actuaciones que van encaminadas a intereses personales y de grupo”.
En la sesión plenaria de la Asamblea Nacional de este lunes, 20 de junio de 2022, Juan Lloret, legislador de la bancada de la Unión por la Esperanza (UNES) que agrupa a correistas se aferró al decreto de Estado de Excepción firmado por el presidente Guillermo Lasso en el que argumentó “grave crisis y conmoción interna”, para deducir una activación del artículo 130 de la Constitución referida a la destitución del presidente o presidenta de la República.
Wilma Andrade, de la bancada de la Izquierda Democrática (ID), recordó que con la Constitución de 2008 se subsanó el vacío con la subrogación del vicepresidente o vicepresidenta de la República.
En el quinto párrafo de este apartado de la Carta Política del Estado se señala de «manera clara y contundente» que, a falta o ausencia definitiva o parcial del presidente, le subroga el segundo mandatario.
Ante la eventual pretensión de que un presidente o presidenta de la Asamblea Nacional busque la subrogación tendría que pasar por la renuncia, destitución o la revocatoria del mandato del vicepresidente de la República. Pero en el país no se dan las condiciones para que ello ocurra, aseveró.
Constitución hiperpresidencialista
“Hay que tomar en cuenta que la Constitución de 2008 es hiperpresidencialista justamente para que ya no existan estas pretensiones y llamados a la conspiración desde la Asamblea; inclusive una destitución del presidente o presidenta tiene que pasar por la Corte Constitucional. Este es un mecanismo de freno”, afirmó.
“Lo que sí preocupa en la Asamblea es que viene siendo una constante articulada con el correísmo y el Partido Social Cristiano (PSC) por controlar la instituciones que pasan primero por controlar el Consejo de Participación Ciudadana y Control Social (PCCCS) a través de juicios políticos. Esto está en juego en la Asamblea y eso no se ha desarticulado”, alertó
Anticipó que la ID defenderá la institucionalidad y la democracia como único mecanismo que puede habilitar una participación. No se puede caer en el juego de desestabilizar al país o ser cómplices de actuaciones que van encaminadas a intereses personales y de grupo, dijo. (SC)