Resultados en las elecciones seccionales cercan al Gobierno de Lasso

Resultados de las fuerzas políticas en Ecuador.

La muerte cruzada o la reconciliación con sus aliados políticos originales son las opciones para mantener la gobernabilidad los próximos dos años.

El margen de maniobra del Gobierno del presidente Guillermo Lasso se agota, luego de la abrumadora derrota que muestran los resultados de las elecciones seccionales.

Cuando solo faltan por dilucidar los resultados de las provincias de Cañar, Loja, Morona Santiago, Napo y Zamora Chinchipe, cuya transmisión de resultados al Consejo Nacional Electoral ha sido lenta y, hasta la tarde de ayer, apenas completaba el 2% de las actas, estos supusieron un duro golpe para las aspiraciones de Carondelet.

Para los analistas políticos, César Ulloa y Juan Carlos Solines, el gran vencedor de la jornada fue la Revolución Ciudadana, apoyada en una sólida estrategia que busca recuperar el control de lo regional para luego recuperar el control del Gobierno nacional.

Razonamiento que también puede adherirse a los resultados a nivel de prefecturas del movimiento Pachakutik, que hasta el momento tiene el control de seis provincias, con respecto a las siete ganadas por el correísmo.

Al cierre de la edición, los mercados de JP Morgan y Santander Investment Securities mostraban su incertidumbre sobre los resultados del proceso político en Ecuador.

13 provincias para la RC y Pachakutik

Al realizar un balance, la Revolución Ciudadana da un paso adelante al mantener el control de Pichincha y romper el dominio del Partido Social Cristiano en el Guayas, al superarlos tanto en la Prefectura, como en la icónica Alcaldía de Guayaquil.

Recordemos que ni en el mejor momento del correísmo pudo alcanzar esa plaza. La capital del Guayas siempre estuvo en manos socialcristianas y se convirtió en el hito de la oposición de la mano de Jaime Nebot.

Completan las prefecturas de la Revolución Ciudadana, Azuay, Imbabura, Santo Domingo, Sucumbíos y Manabí. Al tiempo que suman también las alcaldías de al menos siete capitales, posiciones que les permitieran ejercer mayor presión sobre el Gobierno.

Pachakutik tampoco se queda atrás, cuenta ahora con seis prefecturas a nivel nacional y el control de tres capitales provinciales, destacando la victoria de Diana Caiza, primera mujer alcaldesa de Ambato.

Acorralado y debilitado

Desde hace algún tiempo, el Gobierno no tiene respaldo de la Asamblea Nacional, su margen de maniobra desde que Lasso asumió la Presidencia, no estuvo del todo asegurado. En especial, luego de romper la alianza con el Partido Social Cristiano que le permitió llegar a Carondelet.

De esta forma, Lasso no tiene influencia en el Parlamento, con un bloque de legisladores que apenas llega a 12 personas.

Ese bajísimo porcentaje de votos, el 8%, le ha generado una pelea desigual que lo ha obligado a ceder y pactar, incluso, sus rivales casi lo dejan fuera del poder en junio de 2022.

Con esta nueva victoria del correísmo en las seccionales, la bancada parlamentaria con sus 47 legisladores, plantará cara a las propuestas del régimen con mayor fortaleza.

A este escenario, debemos sumar los constantes ataques que el Gobierno de Lasso recibe desde Pachakutik y la Conaie, liderada por Leónidas Iza, otro de los grandes vencedores de la jornada electoral del domingo.

Reconciliación o muerte cruzada

 LA HORA consultó a los analistas políticos Juan Carlos Solines y César Ulloa sobre el cambio. Coinciden en que el Gobierno no tiene un mayor margen de maniobra para garantizar la estabilidad de su gestión y poder finalizar su período en 2025.

Ulloa advierte que si la situación del país se hace más compleja, “al Gobierno solo le queda la muerte cruzada, a menos que negocie con la Revolución Ciudadana y Pachakutik, pero el costo tal vez sea muy elevado”.

Solines acota que el debilitamiento del Gobierno, tras una derrota en la que sus alianzas no lograron victorias de relevancia y en la que consulta popular parece convertirse en una derrota inesperada, su margen de acción disminuye notablemente.

“La situación del Gobierno es de mayor debilidad, en dónde ya no le basta una rectificación o un refrescamiento de líneas o de gabinete. Para gobernar los dos años que faltan debe tomar medidas mucho más drásticas, la muerte cruzada o la reconciliación con quiénes fueron sus aliados para llevarlo a la Presidencia”, remarca el abogado.

No obstante, el líder socialcristiano Jaime Nebot dijo ayer, refiriéndose al Presidente:  “nunca más debemos aliarnos con aprovechadores que carecen de coherencia y de palabra”. Parece que por ese lado la puerta fue cerrada.

Las salidas son cuesta arriba

Ambos especialistas señalaron que el otro gran perdedor es el modelo de partidos políticos. Dicen que es el momento de realizar un proceso de reflexión profundo y un “mea culpa” para afrontar el nuevo tiempo y modelo político que se ha instalado en Ecuador.

El abogado Óscar Terán menciona que este modelo de los partidos políticos requiere un cambio y sugiere que “hay que quitar el control que tienen los partidos para imponer candidatos. Son necesarios partidos con ideologías marcadas y con verdaderos militantes”.

En este sentido, Solines asegura que dentro de los “partidos” hubo una lectura errada de la realidad que vive Ecuador. “La política ha cambiado para siempre y más allá de buscar un culpable, es el momento de una reflexión profunda y un mea culpa que les permita avanzar de una forma real y efectiva”.

Los analistas coinciden en la necesidad de retomar partidos políticos con ideologías claras, con procesos de formación y militancia real para volver a las bases y olvidar a las franquicias y banderas que aparecen y se “venden” en épocas de elecciones. (ILS)