Los problemas económicos se agravaron desde 2013, se requiere 8 afiliados para cubrir el costo de cada jubilado; hoy existen 5. Las reformas al sistema son urgentes.
Hace nueve años, el aporte estatal del 40% al fondo de pensiones del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) llegaba a $822 millones. En 2020, ese aporte llegó a más del doble con $1.730 millones. Ese nivel, según Augusto de la Torre, execonomista en jefe del Banco Mundial (BM) para América Latina, son difíciles de cubrir en las circunstancias actuales y, sin las reformas necesarias, la situación se volverá completamente insostenible en pocos años.
¿Qué significa?
Para 2045, el subsidio público para sostener el sistema de jubilaciones del IESS representará el 30% de la recaudación de impuestos; es decir, alrededor de $4.300 millones anuales. Ese monto suma casi la mitad de lo que actualmente se destina al gasto en nómina de todo el sector público.
Luego de participar en un estudio impulsado por el Ministerio de Economía y el BM, De la Torre alerta que si por falta de liquidez en la caja fiscal el Gobierno de turno no transfiere al menos $1.000 millones al año, las reservas del fondo de pensiones se pueden agotar a más tardar en 2025.
Esto significa que hoy estarían en riesgo las pensiones de los actuales jubilados, así como las de los actuales aportantes de mediana edad, es decir, de entre 30 y 45 años.
EL IESS REQUIERE 8 afiliados activos para sostener a un jubilado.
HOY EXISTE 5 afiliados activos por cada jubilado.
EN 2045, SE ESTIMA QUE HABRÁ 3 afiliados activos por cada jubilado.
Déficit creciente
A pesar de que el aporte del 40% cada vez es mayor, el déficit del sistema también va en aumento (más pago por prestaciones y servicios, que aportes).
En 2014 ese déficit era de $86 millones. El año pasado llegó a $1.895 millones; y, en 2025 sumarán $2.794 millones.
Uno de los problemas estructurales es que el sistema ecuatoriano está diseñado para funcionar solo si se tiene ocho afiliados activos para pagar las prestaciones y pensiones de cada jubilado, pero ahora existe una relación de cinco a uno. En 2045, esa relación será de tres a uno.
La reforma es urgente
En este escenario, el país no solo necesita tener más afiliaciones a través de una mejora sustancial del mercado laboral, sino también debatir si se mantiene el alto subsidio que paga el Estado, a costa de financiarlo con más impuestos o fuertes recortes en otros gastos.
El presidente electo Guillermo Lasso ha asegurado que el ministro de Economía del nuevo Gobierno, Simón Cueva, tendrá entre sus prioridades, además de las reformas laborales y tributarias, un cambio estructural en el sistema de pensiones.
Esa tarea involucra no solo cortar las ineficiencias y despilfarros en el gasto del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS), sino también diseñar opciones que incluyan aumentos progresivos y escalonados en los porcentajes de aportaciones (de acuerdo con los ingresos) e incluso aumentos en la edad para jubilarse.
Otra vía es el establecimiento de un esquema mixto donde se mantenga el fondo común existente, pero se permita que los afiliados tengan cuentas de ahorro individual. (JS)
Puntos clave de la realidad del sistema de pensiones:
- Las reservas del fondo de pensiones se acotan en dos o tres años si el fisco no transfiere $1.000 anuales.
- En Ecuador, la pensión máxima es de $2.200 mensuales; pero el promedio es $680.
- En promedio, un europeo recibe el 60% del promedio de sus sueldos al jubilarse.
- Al jubilarse, el ecuatoriano recibe el 90% del promedio de sus cinco últimos sueldos.
Se necesitan acciones en tres vías:
- Ir hacia un sistema mixto.
· Modificación de parámetros como porcentaje de aporte y edad de jubilación.