Las maestras y cuidadoras reclaman también la entrega de kits de alimentos que, aseguran, no han llegado desde el año anterior.
La red de Educadoras de Centros de Desarrollo Infantil del Ministerio de Inclusión Económica y Social (MIES) realizó un plantón este 17 de junio de 2021 para exigir el pago de sueldos atrasados. Las educadoras se concentraron en la Plaza de la Independencia, en Quito.
Los centros de educación funcionan bajo la modalidad de convenio con tercerizadoras y el MIES. Las docentes señalan que las autoridades no les han dado el apoyo para impartir clases ni herramientas como computadoras, conexión a internet, entre otras, elementos necesarios en época de pandemia.
Comentan, además, que existen familias de bajos recursos que no tienen la tecnología necesaria para acceder a la educación virtual.
«Nosotros realizamos teletrabajo, pero incluso hay familias en condición de vulnerabilidad que necesitan apoyo domiciliario», explicó Carol Guerra, docente del sector de Toctiuco (occidente de Quito).
Otro de los reclamos es que no se han entregado desde el año anterior los kit de alimentos para los niños de esos centros educativos.
Madres de familia han optado por retirar a sus hijos por falta de recursos, según cuenta Sonia Salazar, educadora del Centro infantil Cuendina, del sector de Amaguaña (suroriente de Quito).
La red de Educadoras entregó una carta dirigida al presidente Guillermo Lasso en la que piden se cumpla con el pago de los sueldos atrasados.
Las docentes de estos centros educativos infantiles perciben $548 mensuales, los cuales se reduce a $400 por afiliación voluntaria del IESS, pago de servicios de Internet y retención del Iva, ya que trabajan bajo facturas. Afirman que algunas profesoras han sido desalojadas por falta de pago de arriendo.
El MIES comentó que han realizado mesas de diálogo para revisar estos temas. Asimismo, señalaron que la cartera de Estado no tiene la potestad completa de esta situación porque el servicio es bajo convenios con otras organizaciones. (CV)
Dato: Alrededor de 14.000 Educadoras se ven afectadas a nivel nacional. Existen 9 niños por cada educadora y depende mucho la cobertura de la zona.