A los 18 años es ideal comenzar a ahorrar para la jubilación

dinero para jubilarse
Cada mes se puede ir reservando un porcentaje de los ingresos.

Empezar a guardar dinero para la jubilación, a partir de los 18 años, permite ahorrar hasta un 50% más. Hay que tener las metas claras.

Incluso si es parte de las 2’474.000 personas afiliadas al Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS), se debe pensar en ahorrar, de manera individual, una parte de los ingresos para tener los recursos suficientes cuando llegue la hora de la jubilación.

Actualmente, la pensión promedio que se paga en el país es de $655,20 mensuales, pero las necesidades de una persona de la tercera edad (65 años o más) pueden superar los $700, como consecuencia de los gastos médicos, entre otros.

Según un estudio mundial del Nationwide Retirement Institute, la edad promedio a los latinoamericanos (inlcuyendo los ecuatorianos) comienzan a preocuparse de si tendrán lo suficiente para sus años de vejez es a los 31 años. Sin embargo, solo el 20% se compromete a ahorrar desde esa edad y en la mayoría de los casos se dan cuenta de que les faltará dinero recién cuando tienen más de 40.

Diferencia de ahorro

Actualmente, solo el 14% de los ecuatorianos acceden a una pensión completa del IESS cuando terminan su vida laboral.

Por eso, una de las recomendaciones más importantes es que se empiece a acumular dinero para la jubilación lo más temprano, es decir, desde los 18 años.

Esa importancia se puede comprender mejor con un ejemplo concreto. Marcelo y Sebastián tomaron la decisión de ahorrar para su jubilación. Marcelo empezó con $25 dólares mensuales cuando tenía 18 años y Sebastián con $100 dólares anuales cuando tenía 45 años. Marcelo y Sebastián invirtieron en una póliza que les pagó una tasa de interés anual de 7%. A los 65 años Marcelo va a tener $77.103,89 y Sebastián tendrá $52,092.67.

¿Qué hacer para tener un digno retiro?

Si comienza desde los 18 años, en teoría tiene 47 años para ir ahorrando de a poco para su jubilación. En cambio, si se compromete recién desde los 30 años o más, el periodo para acumular recursos se reduce drásticamente.

1. Encuentre su razón

Para la jubilación, los jóvenes trabajadores deben visualizar su futuro y encontrar aquello que los motive a ahorrar.

Puede ser que quieran viajar, asegurar su salud, comprar una casa para el retiro o todo junto. Cada una de estas cosas tiene un costo, por lo que debería ser suficiente motivo para comenzar a reservar recursos desde ahora.

2. Infórmese bien

Con la tecnología en la mano, cometemos el error de informarnos sólo por medio de las redes sociales. Si bien no toda la información es errónea, es mejor que busque por cuenta propia fuentes más adecuadas como bancos, compañías de seguros, mercado de valores. Incluso si está en sus posibilidades, puede buscar la ayuda de un asesor financiero para crear un plan de jubilación acorde a sus posibilidades.

3. Ahorre, ahorre y ahorre

Para cualquier joven que ingresa en el mundo laboral es atractiva la idea de ganar su propio dinero: salir de fiesta, al cine, a cenar y pagar cualquier actividad o gusto que se desee. Sin embargo, pierden de vista que ese estilo de vida es fugaz y no podrá mantenerlo en el futuro si no comienzan a valorar la idea del ahorro.

Métodos de ahorro para la jubilación

La financiera Kimmie Greene desarrolló la llamada ‘fórmula Greene’ para determinar el nivel de ahorro que una persona debe tener en función de su edad.

Según esa fórmula, lo recomendable sería que entre los 18 y  20 años se tuviese ahorrado el 25% del salario anual y que a los 30 se consiga el 100% del salario anual. Luego, según la analista, cada ciudadano debe ahorrar un sueldo anual bruto cada cinco años.

Así, a los 35 años se debe tener el doble, a los 40 el triple, a los 45 el cuádruple, a los 50 el quíntuple, a los 55 el séxtuple, a los 60 el séptuple y en los 65, ocho veces el sueldo anual ahorrado.

Porcentaje creciente

Otro tipo de ahorro es establecer porcentajes crecientes. A los 18 años se debería iniciar con el 5% del salario; a los 25 años pasar al 10%; a los 30 años subir al 15%; a los 35 años escalar al 20%; y a partir de los 45 años considerar una reserva mínima del 25%.

Esto se debe combinar con varios tipos de inversiones como pólizas de acumulación o depósitos a largo plazo

El mercado asegurador privado también ofrece planes de jubilación vinculados a seguros de vida. Esta es una segunda opción para garantizar ingresos para la vejez, puesto que los asegurados tendrán a su disposición un fondo de acumulación a una edad determinada. Estos fondos ofrecen un interés de al menos 3% anual.

Una tercera alternativa es invertir en un mix de papeles en el mercado de valores. A largo plazo, una de las opciones más rentables es invertir en el patrimonio de una empresa, mediante la compra de acciones. (JS)