La nueva forma en la que Ecuador realiza la vigilancia es con 13 drones que sobrevolarán 7.800 hectáreas, alcanzando 8 veces más superficie, con mayor precisión.
La Agencia de Regulación y Control y Fito y Zoosanitario (Agrocalidad), como parte de la primera fase de la implementación de la inteligencia fitosanitaria, gestionó con la cooperación internacional 13 drones de última generación, los cuales ya están activos en las 9 principales provincias productoras de banano, plátano, orito y otras musáceas.
Previo a esta iniciativa, los técnicos de la Agencia realizaban recorridos a pie, priorizando áreas críticas de estos cultivos, observando minuciosamente la sintomatología de las diferentes plagas, con base en la superficie del lugar de producción.
De esta manera se monitoreaba solo 4 hectáreas de cultivo en una hora y media. El proceso de vigilancia actual, se complementa con el sobrevuelo de drones que exploran 30 hectáreas en 1 hora, es decir, casi 8 veces más superficie con una efectividad del 100%.
Gracias a esta herramienta digital se genera mayor precisión en la visión aérea del cultivo a una altura de 30 metros, desde donde se pueden apreciar anomalías en las plantas.
Otro de los beneficios son las imágenes georreferenciadas que permiten la ubicación en campo para verificar o descartar visualmente una posible sintomatología específica de Foc R4T.
Las fotografías que se toman van a una plataforma que con inteligencia artificial analiza las muestras y recolecta datos, lo que también representa valiosa información para detectar y cuantificar posibles alertas fitosanitarias de manera temprana.
Los drones que sobrevuelan los cultivos de musáceas en Ecuador se activaron gracias al trabajo permanente de Agrocalidad con la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), Biodiversity y la Cooperación Alemana (GIZ), con este último organismo se mantiene al aire la campaña del Proyecto Alerta con la cual se articula la vigilancia fitosanitaria. (JS)