Gobierno ecuatoriano crea la Subsecretaría de Diversidades

Foto del Colectivo Silueta X de un evento de celebración del Mes del Orgullo Gay 2021.

La nueva entidad tendrá como objetivo principal combatir la discriminación por orientación sexual y combatir las clínicas de deshomosexualización.

El Gobierno ecuatoriano inauguró este 28 de junio de 2021, con motivo del Día del Orgullo LGTBI, una Subsecretaría de Diversidades. El Ejecutivo considera a la institución un hito en el país y nace con el cometido de combatir la discriminación y las clínicas de deshomosexualización.

«Hoy Ecuador marca un hito histórico en el que se une a los 62 países en el mundo en construir una política pública con leyes de protección contra la discriminación por motivos de orientación sexual«, manifestó la secretaria de Derechos Humanos, Bernarda Ordóñez, en el acto inaugural.

La funcionaria añadió que la creación de la Subsecretaría ha sido un derecho durante años «olvidado», y que «las leyes y la normativa no son suficientes» para garantizar la no discriminación y violencia que sufren estas poblaciones.

«Es necesario que sean complementados con esfuerzos para cambiar las actitudes sociales desde una lógica participativa, incluyente y respetuosa», defendió.

Entre las principales estrategias de la recién creada institución del Estado, el subsecretario de Diversidades, Felipe Ochoa, resaltó que se impulsará la implementación de mesas interinstitucionales de trabajo permanentes, «para la clausura de las clínicas de terapia para intentar modificar la orientación sexual o de género».

Lamentó que en este tipo de centros, popularmente conocidos como «clínicas de deshomosexualización«, «se ejercen prácticas que vulneran los derechos de las personas LGBTIQ+».

Se trata de una realidad solapada en Ecuador, pese a las denuncias de ONG y organismos internacionales por la total impunidad sobre la materia.

Miembros del colectivo LGBTI sufren vejaciones en estas clínicas, a donde son enviados por parte de sus propios familiares, y sus responsables los recluyen bajo el pretexto de que sufren algún tipo de trastorno o problema de adicción.

Torturas físicas y psicológicas, humillaciones, mala alimentación, privación de sueño, descargas eléctricas y «violaciones correctivas», son prácticas llevadas a cabo en estas clínicas repartidas por todo el territorio nacional, donde internan a la fuerza a los jóvenes para corregir su orientación sexual, según las denuncias.

El Comité contra la Tortura de la ONU ha expresado su preocupación sobre estos centros, que ahora desde la Subsecretaría de Diversidades se buscará erradicar.

El fundador de la Red Universitaria LGTBI, Ricardo Chica, aplaudió la iniciativa promovida por el Ejecutivo de Guillermo Lasso, que dijo, ha demostrado su «voluntad política de manera clara y real».

El propio mandatario apareció en un vídeo en el que reiteró su compromiso de «erradicar todas las formas de violencia y discriminación«, un proceso que adelantó, «será colectivo». EFE