El nivel de precios ecuatorianos subió 1,94%, pero el promedio en la región superó el 10%.
De enero a diciembre de 2021, el nivel de precios creció 1,94% en Ecuador. Esta inflación acumulada es la más alta si se comparan los datos de los últimos seis años.
Sin embargo, hay que tomar en cuenta que, en cuatro de esos seis años, la inflación fue negativa o casi de cero; y fluctuó entre 0,27% en 2018 y -0,93% en 2020.
Incluso antes de la pandemia, la economía venía estancada y en modo sobrevivencia desde 2015, con un crecimiento promedio de 0,5% del Producto Interno Bruto (PBI). Ese casi nulo crecimiento se desplomó por completo con la COVID-19.
El año pasado, como un efecto rebote de la crisis en 2020, el PIB cerró con un aumento del 4%, de acuerdo a las más recientes cifras del Banco Central del Ecuador (BCE). Ese nivel es el más alto si se analiza la evolución desde 2014.
Pedro Rodríguez, economista, comentó que la inflación que tuvo Ecuador durante el año pasado se debe, en gran medida, a que después de años de estancamiento, la economía aumentó más allá del crecimiento poblacional de 1,7% anual.
Además, otro aspecto importantes es que el consumo de los hogares se recuperó más rápido de lo que lo hizo la capacidad productiva nacional. Así, la demanda por productos fue mayor que la producción local de los mismos.
Todo esto se añade que parte de ese consumo, que no se pude satisfacer con bienes de fabricación ecuatoriana, se cubrió con una creciente importación de bienes extranjeros.
Esos bienes extranjeros llegaron más caros por los problemas logísticos y de contenedores en todo el mundo. Asimismo, muchas de las materias primas para la producción agrícola e industrial también se tuvieron que comprar a costos más elevados en el exterior.
Solo Bolivia se encareció menos
A escala regional, la inflación promedió más del 10% en América Latina. Solo Bolivia, con un 0,9%, tuvo una menor alza del nivel de precios que el Ecuador.
Los vecinos más cercanos de Perú y Colombia cerraron 2021 con 3,81% y 5,62%, respectivamente.
En el primer lugar de las economías más inflacionistas está Argentina con 52%, Brasil con 10,7%, México con 6,2% y Chile con 6%.
En otras palabras, mientras los precios aumentaron a un promedio de 0,16% mensual; en la región, que es una de las más golpeadas por la crisis pandémica, los precios crecieron a casi un 1% cada mes.
Al contrario de Ecuador, la mayoría de países de la región metieron grandes cantidades de dinero en la economía, vía más gasto, subsidios y ayudas directas a personas y empresas. Todo eso se financió, en el mejor de los casos con ahorros y más deuda pública; y en el peor de los casos con emisión de más billetes y monedas de la moneda local.
Por ejemplo, en el caso argentino, el Estado gastó más con emisión sin sustento, lo que llevó a que el sueldo de los ciudadanos de ese país compre 50% menos que al inicio de 2021. Asimismo, el Gobierno de Alberto Fernández, en solo dos años, acumula más de 40.000 millones de nueva deuda pública.
En Chile, entre otras medidas para incentivar la demanda, se autorizaron varios retiros de parte de los fondos de pensiones gestionados por las famosas AFP. Así, se le dio un impulso a la economía de corto plazo a costa de las jubilaciones del futuro.
«La verdadera preocupación que debe tener el país es la generación de empleo y mejorar la competitividad y productividad. Al ser una economía dolarizada, el factor de ajuste cuando hay crisis es el mercado laboral, y una población sin empleo, o con uno precario, no podrán consumir más, a mediano y largo plazo, aunque la inflación sea cero», acotó Rodríguez. (JS)
DATO- La Canasta Familiar Básica cerró en $719,65 mensuales; mientras que la Canasta Vital costó $509,83 en 2021.
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