Los alimentos y el transporte son los más afectados por la subida de precios. La guerra entre Rusia y Ucrania empeoró los problemas provocados por la pandemia.
Ecuador, como todos los países ha nivel mundial, está experimentado una creciente inflación desde 2021. La guerra entre Rusia y Ucrania profundizó los problemas que provocó la pandemia en la economía.
Las familias de ingresos bajos y medio, que gastan más de su presupuesto mensual en alimentos y comida, serán los más perjudicados durante 2022.
A continuación se detallan las claves de la inflación en Ecuador:
1.- La inflación es un indicador que calcula el porcentaje promedio de aumento de los precios en la economía. Así, por ejemplo, si los alimentos se encarecieron en 3%, la vivienda en 1,5%, salud y educación en 2%, la inflación esa economía hipotética de tres sectores sería 2,16%.
2.- Los desajustes provocados por la pandemia (caída de la producción, problemas logísticos y encarecimiento de insumos y materias primas), a lo que se suma la crisis relacionada con la guerra entre Rusia y Ucrania (petróleo a más de $100 por barril y más encarecimiento de insumos), han provocado que, con corte a febrero de 2022, la inflación anual en Ecuador se dispare al 2,71%.
3.- La actual inflación es la más alta registrada desde 2016. Durante 2008 a 2016, con altos precios del petróleo y un gasto público que se duplicó sin sustento, el nivel de precios promedió el 4,63% al año. El porcentaje más alto se alcanzó en 2008 con 8,39%.
4.- La inflación de 2022 se concentra sobre todo en dos sectores: alimentos y transporte. Las familias de ingresos bajos y medios son las más afectadas porque destinan, en promedio, entre el 53% y el 43% de su presupuesto mensual en gastos de comida y movilización. Los segmentos de más ingresos, por su parte, menos del 32%.
5.- Ante la subida de costo de producción, las empresas tienen dos opciones. O suben los precios al consumidor hasta cubrir el encarecimiento de los insumos y materias primas; o reducen su ganancia para evitar perder mercado con productos demasiado caros para la realidad del país. Durante 2021 y el inicio de 2022, la industria alimenticia ha optado por no subir demasiado los precios y reducir su margen de ganancia.
6.- En promedio, la inflación en América Latina ha llegado a cerca del 10%. Vecinos como Colombia y Perú han tenido aumentos en el nivel de precios que superan el 3,5% y hasta casi el 7%. Para dar ayudas sociales y subsidios, la mayoría de países de la región han emitido más de sus monedas propias, esto ha provocado que la demanda se recupere más rápido que la capacidad productiva de las empresas. El resultado ha sido bienes y servicios más caros.
Ecuador, con moneda propia y poco espacio para expandir el gasto (sobreendeudamiento), no pudo inyectar los mismos niveles de recursos en la economía como sus vecinos.
7.- El Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INEC) calcula el precio de la llamada Canasta Básica Familiar (CBF) todos los meses. Esa canasta incluye un paquete de alrededor de 75 productos y servicios, entre alimentos, alquiler, transporte, vestimenta, salud, educación y servicios. Con corte a febrero 2022, esa CBF costó $725,16 para una familia tipo de cuatro miembros.
8.- De acuerdo con el INEC, una familia de cuatro miembros debe gastar mensualmente, en promedio, al menos $237,42 en alimentos básicos. A eso se debe sumar alrededor de $49,7 en vestimenta; y $36,56 en transporte. Si se añade los $107,10 mensuales en salud, apenas en cuatro aspectos se va un total de $430,78, es decir, casi el 60% de la CBF.
9.- Quito y Ambato son las ciudades más caras cuando se trata de comprar alimentos. En esas dos urbes, en promedio, se necesitan más de $250 mensuales para la comida de una familia de cuatro miembros. Sin embargo, la Canasta Básica Familiar (CBF) más costosa, con un valor de $753,63 al mes está en Cuenca. En la capital azuaya están los costos de vivienda (incluido alquileres) más altos del país.
10.- A inicios de 2022, el ministerio de Economía proyectaba una inflación de hasta el 2,5% en Ecuador, pero con la guerra y el mayor encarecimiento de los insumos y materias primas importadas, ahora se calcula un porcentaje de hasta 4%. (JS)