El país enfrentó un año crítico marcado por sequía histórica, apagones, incertidumbre política y subida de impuestos. Las exportaciones atenuaron el golpe, pero el consumo interno y la inversión se desplomaron.
El Banco Central del Ecuador (BCE) confirmó este martes 15 de abril de 2024 que el Producto Interno Bruto (PIB) del país registró una contracción del 2,0% en 2024, cerrando así un año complejo para la economía nacional.
Según los datos publicados por la entidad, el desempeño negativo estuvo impulsado por la caída del consumo de los hogares (-1,3%), el ajuste en el gasto público (-1,2%) y una fuerte disminución de la inversión (-3,8%).
Por su parte, las exportaciones crecieron un 1,8% anual, atenuando parcialmente la contracción, mientras que las importaciones aumentaron en 1,7%.
A nivel sectorial, solo cinco de los veinte sectores económicos mostraron cifras positivas:
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Agricultura, ganadería y silvicultura: +3,1%
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Actividades financieras y de seguros: +1,3%
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Actividades inmobiliarias: +1,3%
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Manufactura de productos alimenticios: +0,2%
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Salud y asistencia social: +0,3%
El informe del BCE identifica múltiples factores internos y externos que marcaron el deterioro macroeconómico del país en 2024. Entre ellos destacan:
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El estiaje más severo en seis décadas, que obligó a cortes de energía entre abril y diciembre, afectando la producción.
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El cierre progresivo de pozos petroleros en el Bloque 43-ITT, con impacto directo en ingresos fiscales.
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La incertidumbre política previa a las elecciones de 2025, que retrasó decisiones de inversión.
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Una reforma fiscal de emergencia, con aumentos en el IVA, ISD y la implementación de contribuciones temporales de seguridad para financiar el conflicto interno.
En este escenario, el país logró un acuerdo con el FMI para un programa de Servicio Ampliado del Fondo por $4.000 millones, aprobado en mayo de 2024. Durante el año se desembolsaron aproximadamente $1.500 millones como parte del programa.
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La contracción del 2,0% en 2024 marca un punto de inflexión para la economía ecuatoriana, que había mostrado resiliencia entre 2021 y 2023. El PIB en términos reales se situó en $113.123 millones (con base 2018), mientras que en términos nominales alcanzó los $124.676 millones.
Con la reelección de Daniel Noboa tras las elecciones del pasado 13 de abril de 2025 y con compromisos internacionales vigentes, los próximos trimestres serán claves para determinar si el país logra recuperar la senda del crecimiento sostenido.
Según el exministro de Economía, Fausto Ortiz, «todo lo que crecimos en 2023 se lo llevó el 2024. 2025 y posteriores tienen una gran tarea por cumplir».
Mas de $1.900 millones en pérdidas por los apagones
El Banco Central estima en $1.916 millones las pérdidas por los cortes de energía del 22024. Eso significó un impacto de -1,4% sobre el PIB.
Los tres sectores más afectados por los cortes de energía fueron: comercio con pérdidas por -$763,1 millones, manufactura con -$380,2 millones y servicios con -$374,1 millones». (JS)