Créditos llegan a menos del 10% de los pequeños y medianos productores agrícolas

CRISIS. El agro ecuatoriano tiene baja productividad y poco financiamiento.
CRISIS. El agro ecuatoriano tiene baja productividad y poco financiamiento.

El éxito de la entrega de préstamos baratos para los agricultores dependerá de un mejor manejo de la banca pública y de que se ofrezca asesoría técnica a los beneficiarios.

El 65% de los pequeños y medianos productores agrícolas financian sus actividades con fondos propios, un 26% recurre a fuentes informales (chulco, amigos y familiares) y un 9%, aproximadamente, accede de manera efectiva a préstamos bancarios y de cooperativas.

En este contexto, la producción del agro subsiste sin un real financiamiento formal y sin incentivos; pese a que desde este sector proviene $1 de cada $2 que se generan por exportaciones.

Desde la campaña, el ahora presidente Guillermo Lasso ofreció que enfrentaría este problema con una de sus medidas ‘estrella’: créditos al 1% con un plazo de hasta 30 años.

Se debe planificar el destino de los recursos

El 12 de diciembre de 2021, a través de un decreto ejecutivo, Lasso ordenó que sea “prioridad nacional” la concesión de ese tipo de créditos de interés social.

El objetivo es comenzar a entregarlos desde enero 2022, pero la principal pregunta es: ¿será suficiente para comenzar a revertir el abandono que sufre el campo ecuatoriano?

Ruperto Rivera, economista y pequeño productor, explicó que dependerá de cómo se establecerá a los beneficiarios y los requisitos que se impongan para acceder a los préstamos subsidiados.

“Tanto los bancos privados como los públicos entregan cantidades nada despreciables de recursos para financiamiento, pero a los agricultores más pequeños y necesitados les llega poco, tarde y a veces nunca. Se debe cuidar el malgasto, es decir, que los créditos no vayan a los mismo que siempre se beneficia y la situación no cambie”, dijo.

Según el Sistema de Información Pública Agropecuaria (SIPA), durante 2021, BanEcuador colocó más de $251 millones en préstamos a los agricultores; mientras la Corporación Financiera Nacional (CFN) sumó alrededor de $21 millones.

Por su parte, desde los bancos privados y las cooperativas, los créditos llegaron a $151,22 millones.

Sin transparencia no habrá cambios

Solo en 2021 se destinaron más de $423,22 millones para financiar al agro (64% con recursos públicos), pero los productores se quejan de falta de liquidez y apoyo.

En este sentido, Rivera puntualizó que la iniciativa de Lasso puede fracasar si no se solucionan los malos manejos y la poca transparencia registrada en las instituciones financieras estatales.

En septiembre de 2021, la Contraloría General del Estado informó sobre los resultados de su Reporte de Control Público, en el que se revisaron 103 exámenes de varias instancias públicas, incluyendo bancos.

Solo en el 6% de esos exámenes no se encontraron irregularidades y en el caso de las instituciones financieras hay vacíos en el manejo de cartera, balances y, en suma, en el adecuado destino de los fondos públicos.

Así, la principal tarea del Gobierno es asegurarse que las entidades que darán los créditos funcionen bien para que la inversión dé resultados.

Problemas por resolver

Todavía no queda claro cómo se concretará la medida decretada por Lasso si, en la disposición transitoria primera de la Ley de Desarrollo Económico (reforma tributaria), se establece que la entrega de créditos a bajo costo dependerá de la fusión entre Banecuador y la CFN.

Según esa disposición, se da un plazo de 60 días, a partir del 29 de noviembre 2021, para iniciar ese proceso.

Aníbal Domínguez, pequeño productor agrícola, comentó que, sin unos bancos públicos bien estructurados, aumentan las dudas sobre los créditos.

“Voceros del Gobierno se han quejado de la situación en la que recibieron las instituciones financieras, pero no han transparentado todos los problemas. Tampoco se sabe cuánto demorará la fusión, pero ya se anuncian préstamos desde inicios de enero de 2022”, acotó. (JS)

18,24% de los productores agrícolas en el país tienen estudios secundarios terminados. La edad promedio es entre 41 y 60 años.
60% del 1’504.694 hectáreas de cultivos permanentes se concentra en la producción de cacao, banano y plátano.

Crédito sin asesoría técnica será un mal negocio

  • Si se entregan créditos de, en promedio, $5.000, el Gobierno podría beneficiar a alrededor de 200.000 productores.
  • En campaña se aseguró que los $1.000 millones necesarios para los créditos al 1% llegarían con apoyo de organismos multilaterales; pero no se ha explicado cómo será ese modelo.
  • Los recursos no tendrán mayor impacto si no van de la mano de asesoría técnica y acompañamiento.
  • En el mismo plan de Gobierno de Lasso se reconoce que el 91% de los productores nunca ha realizado un análisis del suelo de sus cultivos ni han recibido ningún tipo de capacitación.
  • Alrededor del 30% no cuenta con la maquinaria y la tecnología mínima adecuada para trabajar.
  • Si todo se queda en la entrega de recursos, el problema no se solucionará. Ecuador seguirá lejos de su potencial agrícola. Países como Holanda han basado su desarrollo agrícola y agroexportador en la investigación, innovación y tecnología.