Las fuerzas políticas se reacomodarán en el Consejo de Participación Ciudadana y Control Social

INSTITUCIÓN El Cpccs está a la espera de las decisiones de la Asamblea Nacional.
INSTITUCIÓN El Cpccs está a la espera de las decisiones de la Asamblea Nacional.

La Constitución dispone que los funcionarios suplentes deben reemplazar a las autoridades principales ante su ausencia temporal o definitiva.

La búsqueda de una nueva mayoría será el primer reto que tendría que afrontar la nueva institucionalidad del Consejo de Participación Ciudadana y Control Social (Cpccs) en caso de que Hernán Ulloa,  actual presidente del organismo; la vicepresidenta María Fernanda Rivadeneira, y los vocales Francisco Bravo e Ibeth Estupiñán, sean censurados y destituidos en una sesión del Pleno de  la Asamblea Nacional  convocada para las 14:30 de este viernes, 17 de noviembre de 2022.

Las fuerzas políticas en el Cpccs se deberán reacomodar de cara, no solo para  la elección de nuevas autoridades   (presidente, vicepresidente, secretario, etc),  sino para la continuación de procesos de designación de autoridades de control,  entre ellos, el titular de la  Contraloría General del Estado y la renovación parcial del Consejo Nacional Electoral, y el Tribunal Contencioso Electoral.

Las cuatro sillas que quedarían vacantes serían ocupadas por Mónica Moreira, Karina Ponce, Carlos Figueroa y Jaime Chugchilán.

“Obviamente se va a configurar una nueva mayoría; ojalá esta vez sea de siete. Si se va la actual mayoría por el juicio político, tiene que suceder que entre los consejeros se conforme una nueva mayoría para poder avanzar de manera adecuada y transparente,  y en base a la meritocracia por sobre cualquier interés”, dijo Juan Javier Dávalos, consejero del Cpccs, quien junto a David Rosero y a Sofía Almeida quedaron a salvo de la interpelación en el Legislativo.

Ante la eventualidad de que Carlos Figueroa -de tendencia anticorreista-    se principalice como vocal, Dávalos, no se cierra a la posibilidad de llegar a acuerdos con todos los suplentes para avanzar en los procesos.

Consideró que, más allá de la afinidad político-ideológica  de los consejeros, lo que se busca es la independencia a la hora de designar autoridades.

“No se trata de poner en el debate al correísmo, al anticorreísmo,  o al socialcristianismo. Lo que pasa en el Consejo tiene que ver con una dualidad:  haces lo que tienes que hacer en función de la transparencia o haces lo que el Gobierno pide que se haga”, expresó.

Anticipó que, por ejemplo, el nuevo Contralor que sea designado tendrá, sobre todo, que auditar la gestión  desarrollada por el expresidente de la República, Lenín Moreno, y el actual presidente Guillermo Lasso. “Esperemos que el nuevo Contralor sea lo suficientemente independiente de esos gobiernos para que pueda vigilar que los recursos se ejecuten o se hayan ejecutado de manera adecuada”, indicó.

En octubre de 2021, como vocal alterno,  Carlos Figueroa denunció ante la Fiscalía la existencia de aparentes redes de corrupción y falta de medicamentos en hospitales del Instituto de Seguridad Social (IESS) .

Autoridades

Los consejeros de minoría en el Cpccs (Dávalos, Almeida y Rosero), aún no piensan en el relevo en la Presidencia y Vicepresidencia del Cpccs.

“Todavía no lo hemos pensado, no hay que adelantarse, primero es el juicio, la designación de los suplentes y en función de esto se acordarán y se tomarán las mejores decisiones, pensando en cumplir con nuestras atribuciones”, indicó Dávalos, quien dijo que no ha pensado en que él podría asumir la Presidencia, pero señaló que todos son legítimos candidatos para el cargo.

Consecuencias del juicio

Mireya Pazmiño (Pachakutik), quien mocionó la continuación del juicio en contra de cuatro vocales del Cpccs, fue expulsada de las filas de esta tienda política.

Salvador Quishpe, jefe de bloque del Pachakutik, la acusó de estar en permanente contradicción con la línea del movimiento. “Lo que agotó la paciencia fue la moción que presentó cuando la decisión de Pachakutik fue que la interpelación tenía que ser a los siete vocales del Cpccs”, resaltó.

Atribuyó que la intencionalidad de “salvar” a Rosero,  Almeida y  Dávalos, es facilitar al correísmo y al PSC a  volver a tener mayoría en el consejo para la designación de autoridades de control.  (SC)

Así se configuraría el nuevo Cpccs

David Rosero: reelecto en 2019 como vocal. Integró el primer Cpccs entre 2010-2015. Fue uno de los dos consejeros críticos (junto con la exvocal Andrea Rivera), del régimen de Rafael Correa.

Sofía Almeida: expresidenta del Cpccs. Antes se desempeñó como funcionaria de la Contraloría en la delegación provincial del Guayas. Es  hija de Pedro Almeida, exgobernador de Los Ríos, y sobrina del Luis Almeida, asambleísta del PSC.

Juan Javier Dávalos: vocal en funciones desde 2019. Fue uno de los candidatos que más votos obtuvo; cerca de 800 mil, pero no calificó para ser Consejero principal sino alterno. Se principalizó  tras la destitución de Carlos Tuárez.

Carlos Figueroa: médico y crítico de Rafael Correa. Fue sentenciado a cumplir una pena en prisión junto al exasambleísta Cléver Jiménez  y su entonces asesor, Fernando Villavicencio, por presuntas injurias contra Correa. Jiménez y Villavicencio se refugiaron en Sarayaku para no cumplir la pena. Figueroa fue capturado y estuvo seis meses en prisión.

Mónica Moreira: licenciada en Ciencias de la Educación por la Universidad de Guayaquil. Tiene una especialización en Gestión de Procesos Educativos. Fue capacitadora en la Central Única de Trabajadores, y en la Red de Maestros.

Karina Ponce: economista por la Universidad Técnica Particular de Loja, tiene un diplomado en economía en desarrollo del Consejo Latinoamericano de Ciencias Sociales. Con trayectoria de representación estudiantil.

Jaime Chugchilán: abogado por la Universidad Técnica Luis Vargas Torres. Tiene un diplomado en Migración y Gobernanza, trabajó en el sector público en la extinta Secretaría del Migrante.

La Constitución dispone que el Pleno del Cpccs debe contar con vocales alternos.