Asentamientos humanos ponen el riesgo el agua pura del Atacazo

VIDA. En el cerro Atacazo está una de las fuentes de agua más antiguas de Quito.
VIDA. En el cerro Atacazo está una de las fuentes de agua más antiguas de Quito.

En el cerro Atacazo está una de las fuentes de agua más antiguas de Quito y una de las más vulnerables.

Desde su fundación, Quito se abasteció de las aguas provenientes del Pichincha. Esto se prolongó hasta finales del siglo XIX, cuando el crecimiento poblacional de la ciudad obligó a recurrir a la acequia o canal del Atacazo, donde se encuentra la Planta de potabilización Filtros Pichincha Sur, que actualmente aporta con 13 litros por segundo al sistema de agua potable El Troje.

La Empresa Pública Metropolitana de Agua Potable y Saneamiento de Quito (Epmaps) describe al cerro Atacazo como una de las fuentes de agua más antiguas de Quito y también como una de las más vulnerables, debido a los asentamientos humanos que se encuentran a menos de 2 km.

Asentamientos

La construcción de viviendas e incluso barrios se expande, de forma desordenada,  en el Atacazo. La población se asienta cerca de los pajonales y de las galerías de agua, cuya función es primordial para mantener la pureza del agua.

Tomás Medina, ingeniero ambiental, señala que los pajonales permiten absorber el agua de la neblina o de la lluvia que cae en la zona. “Son casi como un impermeable para el suelo”, ejemplifica.

Medina advierte que la presencia humana es una parte de lo que provoca contaminación, pues también está aumentando la presencia de animales. “Las ovejas, las cabras, las vacas contaminan o se comen los pajonales”. A esto se suma el peligro de que aparezcan enfermedades zoonóticas transmisibles entre animales y humanos que terminan suponiendo un gran riesgo para la salud.

Faltan controles

En 2012, en Quito se aprobó la Ordenanza municipal 446, con la que se construyó el Sistema de Parques Metropolitanos en el Área natural de Intervención Especial y Recuperación (AIER), de las laderas del volcán Pichincha y del cerro Atacazo.

La ordenanza buscó evitar la construcción de inmuebles de propiedad pública, privada o comunitaria en esas zonas. Sin embargo, la norma se quedó en el papel. Según el Atlas de Amenazas del Distrito, 198 barrios se ubican en las laderas del Pichincha. En este mismo documento se menciona como zona de riesgo por asentamientos a La Comuna, donde el aluvión del 31 de enero de 2022, dejó 28 muertos.

De acuerdo con la Ordenanza, la restricción para construcciones se aplica a las áreas comprendidas desde la quebrada Pogyo Cucho, en el norte de Quito, hasta la quebrada Saguanchi en el sur. En total, es una extensión de 9.932 hectáreas, que incluyen al Sistema de Parques Metropolitanos Pichincha-Atacazo y seis parques más, con un total de 1.115 ha: Rosa de los Andes, Bosque-Vista Hermosa, Pinar Alto, Atucucho, Norte Singuna y el parque Huayrapungo Chilibulo.

Mónica Sandoval, concejala de Quito, ha sido enfática en señalar que la regularización de barrios (tengan o no parámetros técnicos) es una “jugada política”. Ella considera que el Municipio debe trabajar en planes de rehabilitación de zonas abandonadas, como el sector del antiguo aeropuerto, en el norte de Quito.

Peligra el agua

En el caso del cerro Atacazo, Epmaps señala que para precautelar el cuidado de los pajonales y las quebradas, el Municipio de Quito compró 411 hectáreas de terreno que estaban en manos privadas para declararlas como zonas de conservación. El plan sería continuar con la compra de más hectáreas. Mientras tanto, se han contratado guardaparques que recorren el cerro evitando actividades de pastoreo.

Pero para Medina, la solución debe ser que la mayoría de hectáreas del Atacazo se declaren áreas de conservación.

“Sería terrible que la falta de control contamine el agua de este cerro que tiene excelentes indicadores de calidad. Los quiteños tenemos ejemplos claros de lo que puede ocurrir cuando no hay prevención, por ejemplo, el Machángara”, agrega. (AVV)

La Empresa de Agua Potable y Saneamiento y el Fondo de Protección del Agua adquirieron 413 hectáreas necesarias para consolidar el Área de Conservación Hídrica (ACH) Atacazo.
El 25 de marzo de 2022, la  Epmaps detalló que se planea ampliar el área de conservación hídrica Atacazo, con una posible adquisición de 755 hectáreas.
El Atacazo garantiza el abastecimiento de agua a cerca de 270 mil moradores, principalmente del centro y sur.