Las afiliaciones al IESS crecen 2% en un año y la urgente reforma estructural quedará para el próximo Gobierno

REALIDAD. El IESS es uno de los principales retos para los próximos gobiernos
REALIDAD. El IESS es uno de los principales retos para los próximos gobiernos

La comisión creada por Guillermo Lasso, con el fin de cambiar el sistema para que no quiebre, tendrá una propuesta para inicios de julio de 2023. No se contempla subir la edad de jubilación.

Según datos del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS), se han registrado alrededor de 77.000 nuevos afiliados durante los últimos 12 meses.

Esto representa un incremento de apenas el 2% entre abril 2022 y abril de 2023. El año pasado, el IESS contaba con 3′681.094 aportantes y en la actualidad son 3′758.000.

Así, la afiliación a la seguridad social representa el 46% de todos los 8’161.465 ecuatorianos con algún tipo de empleo en el país.

Se necesitan cambios urgentes, tanto en la estructura del fondo de pensiones como en la legislación laboral. El número de afiliados es insuficiente para cubrir los gastos y los recursos públicos son escasos para que los pagos de jubilaciones sean sostenibles a mediano y largo plazos.

Sin embargo, el actual Gobierno ya ha descartado emitir un decreto ley para flexibilizar y facilitar la contratación laboral durante los seis meses que le restan en el poder.

La pregunta que queda es qué pasará con la comisión que fue creada por el presidente de la República, Guillermo Lasso, para proponer reformas al sistema de pensiones.

Según Augusto de la Torre, miembro de dicha comisión, el trabajo continúa y ya se ha pasado a la etapa de sustento técnico y numérico para establecer las recomendaciones finales y la propuesta de reformas.

Aunque en primera instancia se había acordado que las recomendaciones y las propuestas se presentaran en mayo de 2023, se pedirá una prórroga para que sea a finales de junio y comienzos de julio de 2023.

El Gobierno tampoco emitirá ningún decreto ley para reformar el sistema de pensiones; pero se espera dejar sentadas las bases para el debate social y que las próximas autoridades tomen decisiones.

Hacia un sistema sostenible

Según Rodrigo Ibarra, principal responsable de la empresa Actuaria, la reforma que se está trabajando no busca proponer ningún mecanismo que signifique una privatización del sistema. Lo que se busca simplemente es que no quiebre.

Por su parte, Pablo Lucio Paredes, miembro de la comisión creada por Lasso, recalcó, durante una entrevista en Radio Democracia, que, en las circunstancias actuales, de lo que se trata es de “preparar el camino. Los cambios sustanciales necesitan el consenso de todos los involucrados. Si se hace por decreto en poco tiempo la reforma va a ser invalidada y eso no queremos”

En este contexto, para que la propuesta sea sustentable y tenga posibilidades de generar consensos en la sociedad, los seis pilares básicos son los siguientes:

1 Una clara estrategia para respetar los derechos adquiridos:  A los jubilados actuales no se les toca su jubilación y sus condiciones establecidas. Por eso, los jubilados deberían ser los principales promotores de la reforma. Además, se propone, por ejemplo, que las personas con 55 años o más, o los que ya han aportado 15 o 20 años al IESS no vean modificadas sus prestaciones ni las condiciones con las que ingresaron al sistema.

2 No se toca la edad mínima de jubilación: Se van a proponer reformas al sistema de jubilación vitalicia que no incluyan cambios en la edad mínima de jubilación.  “La comisión quisiera proponer que el beneficio recibido sea proporcional a las aportaciones de cada afiliado”, ha dicho De la Torre. Esto implicaría, por ejemplo, que si un ecuatoriano quiere jubilarse a los 60 años lo pueda hacer; pero la pensión va a ser menor. Asimismo, si se quiere jubilar a los 70 también lo pueda hacer, con una pensión mayor.

3 Crear un marco legal que promueva el ahorro: Ecuador ya tiene un ecosistema de ahorros previsionales que funciona bastante bien. Ejemplos de esto son los fondos previsionales de la UNE, la Espol y la Universidad Central. La idea es fortalecer estos esquemas y propiciar que existan más. En el mismo IESS existe un fondo llamado de cesantía, que podría potenciarse para convertirse en un mecanismo de ahorro.

4 Establecer un sistema mixto: Cuando llegue la jubilación, el objetivo debe ser que la gente acceda a ingresos adecuados para no reducir su calidad de vida. Esto solo se puede lograr con sistema mixto; donde no solo se mantenga el derecho a una pensión vitalicia, como está establecido en el régimen vigente; sino también se permita un ahorro individual para la vejez.

5 Equidad y eliminación de distorsiones: A la gente le interesa que el sistema de pensiones sea equitativo. La realidad es que es muy inequitativo, por ejemplo, se pagan pensiones bastante grandes a personas que se afilian a los 60 años, aportan por 10 años y se jubilan a los 70 años.

Este tipo de afiliados incluso pueden llegar a cobrar más que otros con 30 0 40 años de aportaciones. Estas distorsiones deben ser eliminadas.

6 Credibilidad y mejor institucionalidad: Como ya publicó LA HORA, también se necesita atraer a más trabajadores independientes a través de darles facilidades para la afiliación y mejorar la administración del IESS. Para esto último, se va a proponer que el seguro de pensiones tenga su propia directiva aparte de la de los otros fondos. Al final, se busca darle más credibilidad al sistema. (JS)

Entre enero y abril de 2023, el Gobierno tuvo que desembolsar más de $7 millones diarios solo para cubrir una parte del aporte estatal del 40%.