Transición

Diego Lara León

Una organización perdura en el tiempo y sus administradores son obviamente temporales.

Hemos visto entidades del Estado, y una que otra privada tener cambios de administradores y equipos directivos por decirlo menos “difíciles”. Lamentablemente se ha vuelto común “echar la culpa” de la realidad de la organización al administrador que se va, “todo se ha hecho mal” y “todo queda en ruinas”.

En administración gerencial se recomienda transiciones ordenadas y orgánicas. Recordemos que una organización tiene “vida propia” y un proceso de cambio brusco va a generar que los objetivos y proyectos se paralicen o reduzcan su crecimiento, luego salir de esa inercia es complejo y hay un alto costo de oportunidad.

El lunes 10 de febrero acudí por una gentil invitación a mi “antigua casa” (mi querida casa, la Universidad Técnica Particular de Loja), a la ceremonia en la cual se posesionó al nuevo Rector (un extraordinario académico y hombre de fe) al Dr. Santiago Acosta Aide.

En esa ceremonia también se homenajeó a un maestro y amigo, al Rector saliente el querido Dr. José Barbosa Corbacho, un hombre apasionado por la innovación y el emprendimiento.

Que bien le hace a una organización, en este caso a la UTPL y a su comunidad universitaria una transición ordenada, generosa, técnica. Oír al Rector entrante agradecer el trabajo, reconocer los logros y proyectarse con nuevos y enormes retos por el bien de Loja; y, escuchar al Rector saliente decir a la comunidad universitaria que la organización queda en las mejores manos; y, al final un abrazo fraterno entre ambos. ¡Qué buena lección!

“Una sociedad es el reflejo de lo que fueron sus universidades hace 20 años”. Gracias a quienes soñaron y trabajaron estos 20 años y que buen futuro tiene Loja con la universidad que se sigue construyendo. (O)

@dflara