Pandemia

El Covid-19 es ya una pandemia. Así lo declaró ayer el director general de la Organización Mundial de la Salud, Tedros Adhanom. En un profundo discurso, en el que se refirió a los varios aspectos de este fenómeno mundial, el médico etíope hizo un llamado a la acción, sin caer en el pánico.

Es importante entender que el utilizar la palabra ‘pandemia’ en lugar de ‘epidemia’ no cambia la naturaleza de la enfermedad, la seriedad de sus síntomas ni su mortalidad. Lo que sí modifica es la forma de encarar el virus y cómo las organizaciones, estados y poblaciones deben reaccionar ante la amenaza.

Aunque no existe un consenso universal sobre la definición de ‘pandemia’, son tres los criterios que llevaron a la OMS a clasificar al nuevo coronavirus de esta manera: un brote o virus que puede causar enfermedad o muerte; transmisión entre persona y persona, sostenida en el tiempo; evidencia de contagio alrededor del mundo.

Es evidente que aparecerán más casos y las cifras de mortalidad podrían mantenerse o decrecer, si es que los países aumentan su capacidad de administrar ‘tests’ a mayores sectores de la población. También hay un consenso sobre que el contagio ahora será exponencial.

La humanidad ha sufrido varias pandemias, incluyendo la reciente en 2009 por la gripe H1N1, así como el virus VIH/Sida. Es alentador que la OMS considera esta, una que puede “ser controlada”.

Como consecuencia, la definición de pandemia elimina la ilusión de que el contagio se puede detener, y ahora los gobiernos y autoridades deberán enfocar sus recursos y esfuerzos en evitar una propagación generalizada. En eso, cada individuo tiene un rol determinante y crucial.


Los espíritus mediocres condenan lo que está fuera de su alcance”. François de La Rochefoucauld Escritor francés (1613-1680)

Cínico: un hombre que sabe el precio de todo y el valor de nada”. Oscar Wilde Dramaturgo irlandés (1854-1900)