Otro ajuste de cuentas

El deterioro en la Asamblea Nacional se acentúa. La solicitud de intervención policial, una desafortunada conversación y los problemas con el cambio de la agenda del día la han sacudido como pocas veces en la presente legislatura y ponen a su Presidenta en una situación crítica. En el centro del grave problema que afecta a esta función del Estado, está su falta de prestigio moral ante la ciudadanía.

Todo evidencia una crisis democrática endémica. La Presidenta del parlamento está en situación crítica. También lo están los involucrados en esta nada patriótica y desenfadada lucha por hacerse con el mando y con las comisiones próximas a ser elegidas. Los abusos del poder y el desprecio a la opinión pública, así como su manipulación sistemática, están llegando a un peligroso límite.

Nadie admite que ese conglomerado de partidos políticos y movimientos escindidos una y otra vez es reflejo de la sociedad que en su momento eligió a cada uno de sus miembros. La dicotomía amigo-enemigo llega a extremos de tal magnitud y pobreza cívica, que leyes necesarias para el país se dejan a un lado para atender a semejante espectáculo de tintes circenses. Así ocurre con el proyecto de la ley anticorrupción.

Somos espectadores avergonzados de un ajuste de cuentas. La pluralidad de intereses solapados que agobia a la Asamblea Nacional no es síntoma de una enfermedad, sino la enfermedad misma. Tal vez la accidentada y bochornosa historia parlamentaria de los últimos decenios nos está pasando factura a todos los ecuatorianos. Tal vez ciertas conductas nazcan de esa catástrofe.


La música es el arte más directo, entra por el oído y va al corazón… Es la lengua universal de la humanidad”. Astor Piazzolla Compositor argentino (1921-1992)

A veces uno realiza un hallazgo cuando no lo está buscando”. Alexander Fleming Médico escocés (1881-1955)