¡Orden, por favor!

A 25 días de las elecciones presidenciales y legislativas, el Consejo Nacional Electoral (CNE) avanza de tumbo en tumbo, improvisando el proceso en medio de dudas y contradicciones.

Ayer, el Comité de Operaciones de Emergencia (COE), ente encargado de la bioseguridad nacional en pandemia, aprobó el ‘Protocolo para la prevención de la Covid-19 en el proceso electoral 2021’. El documento de 27 páginas dedica cuatro a describir el mecanismo de bioseguridad ‘a aplicarse’ en la calificación de movimientos e inscripción de candidaturas, que se dio entre el 18 de septiembre y el 7 de octubre de 2020.

Entre las perlas del ‘Protocolo de bioseguridad para elecciones’ consta una “prohibición de concurrencia”: “ las organizaciones políticas no deben concurrir con simpatizantes que se aglomeren en las afueras de las instalaciones del CNE al momento de la inscripción.”

Letra muerta, en realidad; porque no se aplica, porque no existía el protocolo, porque aún ni siquiera lo aprueba el CNE.

Comparable confusión ocurrió ayer cuando el viceministro de Salud anunció que los miembros de las Juntas Receptoras del Voto debían costear sus propias pruebas PCR antes de presentarse en recintos electorales el 7 de febrero. Poco después, llegó la ‘desmentida’ del CNE.

Al parecer, el Estado aplicará pruebas rápidas a todos los miembros de junta, aunque el protocolo olvidó mencionarlo, como así el procedimiento para financiar la bioseguridad o reemplazar a quienes -ese día- den positivo.

La improvisación es sana en el teatro, mas no en la cosa pública. El proceso electoral seguirá adelante, pero no libre de dudas.

Traer nuevos descubrimientos al paciente es mucho más valioso que acompañarlo en el hospital.”

Özlem Türeci (1967) Científica turco-alemana; fundadora de BioNTech.

Construir la prosperidad requiere prudencia y paciencia; requiere tiempo.”

Fernando Henrique Cardoso (1931) Filósofo, político y psicólogo brasileño.