No callar ni un minuto más

Durante diez años se nos gobernó a los ecuatorianos mediante el uso y el abuso de una densa propaganda oficial. Los aciertos eran de un líder incontestable y dueño de la verdad, que pretendía imponer un pensamiento único y una apreciación única de la realidad. Es decir, la suya propia. Por eso sorprende que se nos diga que se detectaron serias fallas en los proyectos ejecutados entre 2011 y marzo de 2017.

Lo dijo quien fuera hasta hace seis meses su coideario, el presidente Moreno, en su informe al país del pasado lunes. Los problemas, que suponemos de diversa índole, se constaron en más de 640 obras del Gobierno anterior. Se requerirán mil millones de dólares más para su conclusión. Lamentable, desde luego, para los contribuyentes, a quienes se engañó y cuyos impuestos fueron dilapidados.

“Se han registrado incrementos por más del 85% en su valor inicial”, precisó el Presidente. Se acusó de mentir a los medios de comunicación y a los miembros de veedurías que no se dejaron manipular. Pero ante los hechos que se van develando paulatinamente, se concluye que Correa y sus adláteres incondicionales hicieron de la mentira una política de Estado.

La verdad de la mano de la justicia ha comenzado a poner en orden la casa de todos los ecuatorianos. Ambas derrotarán a la corrupción y las prebendas, a las falsedades y los engaños sistemáticos. Es tiempo de no callar ni un minuto más y de cambiar e ir a la raíz de los problemas que nos afectan a todos y que pudieran convertirse en una pesada hipoteca que deberán pagar nuestros hijos y nietos.


Saber que se sabe lo que se sabe y que no se sabe lo que no se sabe; he aquí el verdadero saber”. Confucio Filósofo chino (551 AC-478 AC)

El sabio puede cambiar de opinión. El necio, nunca”. Immanuel Kant Filósofo alemán (1724-1804)