Eduardo Naranjo Cruz
La aplicación de los conocimientos médicos en la vida de los humanos es primordial, todo ser viviente quiere alargar su estadía en el planeta sin sufrir torturas infortunadas, de allí que es imprescindible la existencia de profesionales entrenados para resolver el problema.
Como en toda profesión la vocación juega un papel fundamental, es la satisfacción de hacerlo bien, mediante una larga e interminable dedicación al conocimiento del cuerpo humano, sin embargo, esta carrera por definición humanitaria, no siempre lo es. En la actualidad es frecuente encontrar especialistas que quieren enriquecer, en función de su desempeño.
Si un médico cobra 50 dólares en promedio por consulta y atiende a 10 personas al día tendrá 500 en 5 días 2.500, teóricamente hablando, pues hay tarifas de 20 y otras de hasta 200, más los exámenes que es otro costo.
Los patrocinadores son los grandes grupos farmacéuticos que multiplican sus inversiones por miles de veces. La investigación requiere de enormes sumas ciertamente, pero la recaudación es exponencial. La estrategia es llevar de paseo a médicos destacados a convenciones en lejanos y exóticos lugares, donde les comprometen a promover sus drogas, consolidando el negocio, una píldora de 10 centavos de costo se vende a10 dólares.
Para el ciudadano medio, los hospitales privados son imposibles de pagar por lo que no se beneficiará de los avances tecnológicos, razón por la que el Estado está en obligación de fomentar sistemas de salud que atiendan a la gran masa doliente con eficiencia y precisión, a la vez que vigilar procesos, es conocido el gran negocio que hacen hospitales y clínicas asociados al sistema del IESS, florecimiento gracias a operaciones innecesarias como práctica diaria. Todos los bebes nacen por cesárea.