El problema de fondo

El correísmo atrincherado en la Asamblea Nacional tiene en el CAL un reducto hasta ahora inexpugnable. Desde allí actúan como censores supremos e intransigentes en defensa de sus líderes. El más significativo, por el momento, es el vicepresidente Jorge Glas, pese a la sentencia de seis años de prisión dictada por el Tribunal Penal de la Corte Suprema de Justicia.

Los fieles a Correa saben que si cae Glas en la cárcel, el tinglado de corrupción construido laboriosamente durante sus diez años de gobierno caería como un castillo de naipes. Tienen temor de que, agotadas las instancias judiciales y las presiones políticas a su favor, y ante la perspectiva de alojarse tras las rejas, el aún Vicepresidente acepte algún tipo de colaboración con la Fiscalía.

Controlar el CAL fue una diabólica estrategia política. En él la oposición tiene una minoría absoluta, que poco puede hacer. Sus argumentos y ‘pruebas’ siempre serán insuficientes. La Asamblea Nacional con ese Consejo se impuso un dogal que le impide, de hecho, cualquier intento de fiscalización del resto de las funciones del Estado. Es decir, no es contrapeso de ninguna.

Sin embargo, la cárcel de Latacunga puede hacerle asumir a Glas otras prioridades. Si ‘canta’ muchos de sus ‘coidearios’ (asambleístas incluidos) se verían en serios y peligrosos aprietos. No solo ellos, también quienes permanecen en la sombra y que la pasada ‘década ganada’ se llenaron los bolsillos y recibieron, además, hasta homenajes y blindajes oficiales, así como un largo rosario de privilegios. He ahí el problema de fondo.


En verdad no puedes crecer y desarrollarte si sabes las respuestas antes que las preguntas”. Wayne Dyer Escritor y sicólogo estadounidense (1940-2015)

Si revelas tus secretos al viento no le eches la culpa al viento por revelárselo a los árboles”. Gibran Jalil Gibran Poeta y ensayista libanés (1883-1931)