Tres cantones empiezan la semana en ‘amarillo’

COMERCIO. Informales nunca se detuvieron;

 el cambio de color flexibiliza horarios y transporte.
COMERCIO. Informales nunca se detuvieron;

el cambio de color flexibiliza horarios y transporte.

Tres cantones adicionales pasaron este viernes a la condición de «amarillo» en el semáforo epidemiológico de Ecuador, entre ellos uno de los más contagiados del país, lo que les permitirá reducir el toque de queda en cuatro horas y reabrir algunas actividades comerciales.

Así lo informó la ministra de Gobierno, María Paula Romo, quien reveló que Samborondón, en Guayas, y Paute y El Pan, en Azuay, pasan de fase.

La ministra destacó que Samborondón, cantón vecino a Guayaquil, “también ha solicitado tener un plan piloto para restaurantes en esta fase”, una petición que será analizada por el Comité de Operaciones de Emergencia (COE).

Samborondón, un cantón de clase alta, es donde las autoridades creen que se propagó el coronavirus debido a que muchos de sus habitantes regresaron de países contagiados -principalmente EEUU y España- cuando, en febrero, estaban en vacaciones de verano, aunque el primer caso oficial se constató en la provincia de Los Ríos.

La condición de “amarillo” implica una autorización para la apertura de negocios hasta ahora cerrados por el decreto de excepción del 16 de marzo, toque de queda desde las 18:00 hasta las 5:00, y la apertura de vías de transporte urbano bajo condiciones de ocupación (30% como máximo).

Hasta ahora sólo Daule, también en Guayas, y Palora, en Morona Santiago, habían pasado al amarillo a comienzos de la semana.

Autorización del COE

El procedimiento para cambiar de color exige presentar la decisión al Comité de Operaciones de Emergencia (COE) Nacional, que lo autoriza en base a los índices de contagio, medidas preventivas y riesgos de un posible rebrote.

El primero en pasar al verde

El COE cantonal de Aguarico, en la provincia de Orellana, anunció el viernes que las autoridades ya habían flexibilizado sus restricciones, asimilándose a las normas que regulan el semáforo amarillo y verde.

Dado que el ministerio de Salud no reporta ningún caso de contagio confirmado en el cantoón, y que las prácticas de la población se asemejan a un distanciamiento más que aislamiento, el alcalde Juan Carlos Orellana anunció la decisión de pasar directamente al semáforo verde.

Con esto, el cantón estaría “legalizando el funcionar y el horario”, que ya se da en la práctica.