Las negociaciones con la participación de la petrolera, los comuneros y las autoridades no han dado resultado.
Con carteles donde se exhiben textos exigiendo mejores condiciones laborales a la empresa petrolera argentina CGA, varios grupos de comuneros siguen en pie de lucha en Dayuma (Orellana).
La medida de hecho comenzó el 28 de agosto pasado en forma pacífica, hecho que ha evitado confrontaciones con la fuerza pública. Todo comenzó por el malestar sobre la alimentación inadecuada, la extensa jornada laboral, el incumplimiento en el pago de utilidades, la desigualdad en el tratamiento de los trabajadores locales y extranjeros, el tratamiento discriminatorio y despótico que reciben los trabajadores por parte de los gerentes de la empresa.
Los manifestantes, adicionalmente, exigen que sus coterráneos sean influidos en las nóminas laborales, “porque llegan en gran cantidad trabajadores de otras provincias con privilegios”.
Según el activista amazónico Tino Taumink, desde hace varios días los comuneros han venido cerrando vías principales y secundarias, con el propósito de que se les escuche. “Ha habido un diálogo, como dice el presidente, Lenín Moreno, pero ha sido un diálogo de sordos”, manifestó.
Esta problemática ha sido puesta en la mesa desde hace un año, pero las negociaciones no han dado resultado. Incluso se han dado conatos de incidentes con la fuerza pública. (SE)