Gilo Ortiz es un hombre afortunado. Él, al igual que otros 100 ingenieros eléctricos, en 2013 postularon para ser parte del grupo de alto rendimiento que durante 11 meses se radicaría en Houston, Estados Unidos y Gilo lo logró.
Sus altas calificaciones le hicieron parte de la comitiva de siete profesionales que demostraron de entre los postulantes estar listos académicamente para asumir cargos de alta responsabilidad al interior de la Refinería de Esmeraldas.
El esmeraldeño no invirtió dinero para capacitarse. “Fue una experiencia enriquecedora, ahora tengo que llevarlo a la práctica en la pasantía en la parte eléctrica de la repotenciada Refinería donde soy el coordinador”, comentó con orgullo y agradecimiento.
Mejora inglés
Su coterránea Many Castillo se muestra igual de agradecida por el mejoramiento del idioma inglés y de nuevos software que permitirán llevar a la práctica lo aprendido en el centro de automatización y control de procesos de la industria donde se invirtieron 1.200 millones de dólares para que produzca su capacidad original. 110 mil barriles diarios.
Many y Gilo son dos de los tres esmeraldeños que viajaron a Estados Unidos y visitaron otras refinerías de la potencia mundial. Fabián Chicho, de Quito, destaca que otra de las enseñanzas se centró en la importancia del trabajo en equipo.
A su compañera, Ana María Remache, también se le quedó grabada esa recomendación que fue parte de la convivencia donde la teoría destacó, ya que la práctica se deberá aplicar en sus áreas de trabajo.
¡Una gran experiencia
“Creo que todos coincidimos en que ir becados a Houston fue una gran experiencia. Aprendimos mucho y ahora hay que llevarlo a la práctica”, dijo con orgullo, Karina Pazmiño, de Tulcán.
Ella, junto a sus compañeros, detallaron su vivencia al exministro de hidrocarburos, Carlos Pareja Yannuzzelli. “Son un verdadero orgullo para el país”, enfatizó el exfuncionario petrolero. (MGQ)