"Ví que tiraron un bulto al río"

Hay ocho polics implicados en la desaparici del joven Els Lez, hecho ocurrido a comienzos de noviembre pasado y, al parecer, tuvieron una participaci directa en su muerte.
Lez, comerciante, se trasladaba desde Ambato hacia Esmeraldas, en un bus interprovincial, cuando el vehulo fue interceptado por un comando policial que bajal ciudadano del transporte sin que nadie volviera a tener noticias de .
Ahora, luego de las primeras investigaciones, los uniformados fueron trasladados desde el Comando Provincial de la Polic Nacional de Chimborazo a la ccel No.- 4 de Quito, donde aguardar la sentencia de la Corte Superior de Justicia del Tungurahua.
Este hecho se produjo una semana despu de que el Comando General de la Polic Nacional, cuyo inspector general es Jorge Molina Nez, resolviera dar de baja a esos elementos policiales «por haberse establecido en su contra mala conducta profesional».
De esta forma, los polics Tom Freire Gez, Luis Lez Guachi, Yolanda Ortega Guzm, Luis Criollo Puma, Alvaro Schez Lez, Edisin Quinga Pilataxi, William Chango Colina y Holger Salazar Cepeda tendr en la Ccel No-4 su nueva residencia.
Mientras tanto, el presidente de la Corte Superior del Tungurahua, Ra Gez Orquera, continucon la recepci de los testimonios propios de varios de los testigos y sindicados con la finalidad de llegar a la etapa plenaria donde, previo el dictamen del Fiscal Distrital, se determinar las sentencias respectivas.

El testimonio clave
Uno de los testimonios m esclarecedores de este caso denunciado por LA HORA fue el dado por el guardi del zoolico que queda junto al puente de San Mart, en Bas (donde se habr lanzado el cuerpo de Els Lez), Walter Vayas Merino, quien dice ser el testigo presencial de esos hechos criminales.
«A partir de las 22h00 del micoles 8 de noviembre yo me encontraba en una caseta que exist dentro del cerramiento del zoolico; unas personas se bajaron y empezaron a alumbrar el puente con linternas, y como me parecieron sospechosos me fui a avisarle al patr», sostiene Vayas Merino.

«Escuchunos disparos…»
«El rato que me iba a avisarle escuchunos disparos y luego me fui a mi puesto de guardia; ahobservque estos seres cogn tierra con las manos y luego se corrieron a los carros. Por la mana, cuando yo me fui a mi casa en el lugar donde habn botado la tierra hab sangre», ade el testigo.
«Despu de unos 15 ds vino un carro que se dio vuelta en el puente; se bajaron unos tipos y alumbraron con linternas el puente…; dispararon a un bulto que bajaron del vehulo, creo que fueron tres tiros, y lanzaron el bulto al r», recalca Vayas Merino.
En su declaraci, el testigo afirma que telefonearon a la polic para avisar de lo que hab sucedido en esas dos oportunidades, pero «la polic llegaba un tiempo despu de los hechos vieron lo que estaba ahy se fueron».

Informe policial
No menos importante es la declaraci judicial hecha por el teniente de Polic, Bolar Cdenas Ponce, quien fue designado por el Comando General integrado por el Comandante General de la Polic y por el Consejo de Generales para que realizara la investigaci sobre la muerte y desaparici de Els Lez.
«Al conocer un hecho que puede tener repercusiones en la sociedad ecuatoriana, y en el que est inmersos miembros de la Instituci Policial, el mando dispone como en este caso al Director Nacional de la Polic Judicial para que realice las investigaciones, quien a su vez escoge entre los oficiales», dice Cdenas Ponce.

Importantes revelaciones
Una de las revelaciones m importantes de Cdenas se produjo ante la pregunta de si el grupo antidelincuencial que se investigestuvo conformado al margen de la ley, a lo que respondi «Ellos estuvieron en servicio activo y posiblemente estuvieron cumpliendo disposiciones del Comandante Provincial, quien es el responsable de las actividades de los miembros policiales del Comando Provincial».
En su testimonio, Cdenas sostiene que dentro de las investigaciones se hizo un rastreo en el r Pastaza, mediante el envide telegramas a los diferentes destacamentos, «pero no hubo ninguna comisi para que se rastree el r debido a la longitud del mismo».

Cumpln denes
Cdenas tambi revela los privilegios que tenn los miembros del grupo antidelincuencial. «En vista de que cumpln varias misiones encomendadas, de acuerdo a lo que se conoce ellos no pasaban lista, su trabajo no ten horario, y se les prestaba toda la colaboraci en el Comando para que cumplan la funci que se les encomendaba».
«Quisiera manifestar que la Comisi intervino luego de varios ds que se habn suscitado los hechos, por lo tanto muchas de las diligencias realizadas en primera instancia, por el derecho que tenn los polics a ser asesorados por un profesional del derecho, empezaron a ser cambiados», dice otra parte del testimonio de Cdenas.

M datos
-El guardi del puente San Mart sostiene que uno de los vehulos utilizados por sujetos que dispararon a un bulto que luego botaron al r pertenecer a la Polic Nacional.

-En su testimonio, el guardi afirma que recibiadvertencias de cuatro sujetos que le amaenzaron con matarle con un arma de nueve miletros.

– La investigaci sobre este caso se inicigracias a la insistencia de la hermana del joven desaparecido.

– Los desaparecidos pueden ser m, seg comentan vecinos del lugar, quienes dicen haber encontrado otras osamentas humanas.