Parcialmente, los comerciantes volvieron a ofertar sus productos en este tradicional lugar de Otavalo, tras cinco meses.
Redacción OTAVALO
Desde muy temprano, los espacios de la Plaza de Ponchos, en Otavalo, provincia de Imbabura, volvieron a tener comerciantes que ofertaron sus productos, desde su cierre, en marzo, cuando comenzó la emergencia sanitaria en el país, por la pandemia del coronavirus.
Más de cinco meses tuvieron que pasar para que las autoridades y comerciantes puedan organizarse y plantear un plan de funcionamiento del lugar, dentro de la ‘nueva normalidad’, donde también se vivieron disputas entre dirigentes y funcionarios públicos, precisamente por no llegar a consensos que permitan a los artesanos ofertar sus productos bajo medidas de bioseguridad.
José Conterón, coordinador de la comisión de la Plaza de Ponchos, detalló que desde el 15 de marzo se suspendieron las ventas en este sitio, fecha desde la que ningún comerciante pudo ofertar sus artesanías.
Ceremonia
Con una ceremonia andina, los artesanos y comerciantes kichwas oficializaron la reapertura del Mercado Centenario, conocido también como Plaza de Ponchos.
Desde el Municipio de Otavalo se explicó que, como plan piloto, se autorizó la apertura exclusiva de la manzana de la Plaza de los Ponchos, mientras que “las ferias en las calles aledañas aún continúan suspendidas mientras se evalúe la evolución del Covid-19, y así brindar mayores garantías a quien visite la Plaza Centenario”.
María Quilca, comerciante, mencionó que la pandemia les ha afectado mucho a quienes trabajan en este lugar, porque la mayoría solo dependía de sus ingresos vendiendo sus productos en la Plaza de Ponchos.
“Les tocó salir a buscar trabajo, mientras otros nos quedamos en casa, esperando todos los días una solución para volver a la plaza. Muchos tuvieron que vender sus cosas para sobrevivir. Ahora agradecemos a los compañeros que nos tomaron en cuenta y decidieron luchar por trabajar”, relató.
Richard Lema, quien colaboró con los comerciantes para delinear una estrategia que les permita volver a abrir la plaza, explicó que el plan de contingencia que crearon cubre las exigencias que piden los organismos de control, el cual deberá ser ejecutado por los comerciantes del lugar.
Según se explicó, el horario de atención será de lunes a viernes, con base en distintos cronogramas para que puedan salir los comerciantes. Se estima que desde las 05:30 arriben los artesanos con sus productos, para poder abrir la plaza desde las 09:00, hasta las 16:00.
Álex Cáceres, quien también aportó con el plan de contingencia de reapertura, dijo que han trabajado desde la primera semana de junio, para presentar una propuesta construida en reuniones con los comerciantes.
La Plaza de Ponchos funcionará con un promedio de 300 comerciantes cada día.“Hemos planteado un sistema con vallas, en la calle Sucre, intersección de la Modesto Jaramillo y Salinas, Quiroga y Modesto Jaramillo, donde mantendríamos cerrado el espacio, para tener dos accesos y dos salidas a la Plaza de Ponchos, que se puedan controlar”, mencionó.
Entre las acciones tomadas, afirmó Cáceres que tendrán a personal que incluso controle la entrada y salida de mercadería. “Usaremos también un sistema de semaforización. La plaza tiene una capacidad de 1.080 comerciantes, pero con este sistema se plantea el trabajo con 343”.