Maduro atribuye apagón al ‘desespero’ de EE.UU.

RESPALDO. Manifestación ayer en Caracas en apoyo al presidente interino, Juan Guaidó. (AFP)
RESPALDO. Manifestación ayer en Caracas en apoyo al presidente interino, Juan Guaidó. (AFP)

Redacción CARACAS

AFP

El presidente venezolano, Nicolás Maduro, culpó este miércoles a Estados Unidos del apagón masivo que sufrió el país el lunes, y lo atribuyó al «desespero» de Washington por no haber logrado sacarlo del poder.

Al dar apertura a unos ejercicios militares que se extenderán hasta el 30 de agosto, Maduro reiteró que el corte que afectó a todo el país se debió a un «ataque electromagnético de alta factura tecnológica».

El causante del corte «es el imperialismo norteamericano desesperado por sus derrotas en Venezuela», denunció el mandatario socialista junto al alto mando militar en una transmisión obligatoria de radio y televisión.

Estados Unidos lidera la presión internacional para expulsar a Maduro y que sea sustituido por el líder opositor Juan Guaidó, reconocido como presidente encargado de Venezuela por medio centenar de países.

Un país a oscuras
El pasado lunes, Caracas y los 23 estados del país quedaron a oscuras por una falla en la central hidroeléctrica de Guri (estado Bolívar, sur), fuente de 80% de la energía que consume Venezuela.

La situación impactó los servicios de transporte, agua y las comunicaciones telefónicas.

El Gobierno atribuyó el incidente a «un ataque electromagnético», como también lo hizo en marzo cuando otro apagón paralizó el país durante una semana.

Decenas de ataques
El sistema eléctrico ha sufrido «decenas de ataques» en los últimos cuatro meses, alegó Maduro, y sostuvo que la emergencia ya ha sido superada en un «alto nivel».

«No han podido ni podrán con la unión, la lealtad y la cohesión de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana, y eso los desespera», insistió.

Los apagones son habituales en el país con la mayor reserva petrolera.

Maduro suele achacarlos a sabotajes, pero la oposición y especialistas responsabilizan al Gobierno por falta de inversión, impericia y corrupción en medio de una crisis que, según el FMI, provocará este año una contracción del PIB de 35%, además de otros problemas económicos y sociales.

Grupo de Lima presiona por una salida electoral
° El Grupo de Lima llamó ayer a hacer un «gran esfuerzo» para que Venezuela celebre a la brevedad elecciones que lleven «al restablecimiento del orden democrático» y advirtió que de lo contrario habrá «más presión y sanciones».

Al renovar su respaldo como presidente interino al opositor Juan Guaidó, los cancilleres del Grupo de Lima instaron al Gobierno de Nicolás Maduro a «no dilatar la convocatoria de elecciones presidenciales con todas las garantías, a la mayor brevedad posible».

«En caso de no alcanzarse ese objetivo, se impondrán medidas de presión y sanciones adicionales», según la declaración emitida al cabo de su encuentro en Buenos Aires.

Estados Unidos, principal apoyo de Guaidó, ha impuesto sanciones a Maduro y a decenas de sus funcionarios y desde abril rigen también para la industria petrolera. Además, la Unión Europea ha sancionado a funcionarios venezolanos y han prohibido su ingreso.

Parlamento venezolano aprueba adhesión al TIAR
° El líder opositor Juan Guaidó dio un nuevo paso para expulsar del poder al presidente Nicolás Maduro, al aprobar ayer el Parlamento el retorno de Venezuela a un tratado regional de defensa que ampararía una eventual intervención militar.

Guaidó marcó así los seis meses de su autoproclamación como presidente encargado del país, con reconocimiento de medio centenar de naciones, entre ellas Estados Unidos, que no descarta una acción armada para sacar a Maduro.
«Aprobado por unanimidad de todos los presentes. Queda sancionada así (la Ley)» que reincorpora a Venezuela al Tratado Interamericano de Asistencia Recíproca (TIAR), dijo Guaidó durante una sesión legislativa en una plaza de Caracas.

«¡Sí se puede!», celebraron cientos de simpatizantes la decisión de la mayoría opositora. Venezuela se había retirado del acuerdo en 2013.

«El TIAR no es mágico, no es un botón que apretamos y mañana se soluciona todo», matizó el dirigente opositor.