La defensa de Alexandra Córdova no presentará pruebas en el juicio por el presunto asesinato de David Romo, quien desapareció el 16 de mayo de 2013. Esa fue su decisión después de considerar que “el proceso es nulo” y que “es un sainete armado por la Fiscalía”, de acuerdo con el abogado Milton Castillo.
De esta manera, “el juicio está terminado” para la víctima que renunció a su derecho a presentar pruebas. “Tenemos derecho a la resistencia”, dijo Castillo, quien había solicitado la excusa del juez Julio César Obando. Él fue juez en el proceso por robo del celular de Romo, en el cual no se estableció relación con otros delitos, como la desaparición.
“Cuando una autoridad conoce de un delito que podría tener relación con otros delitos, debe hacer referencia”. Obando no lo hizo, por lo que se habría violado el principio de conexidad, como lo evidenció la Defensoría del Pueblo en su informe.
Sin embargo, el presidente del Tribunal de Garantías Penales Wilson Caiza, no aceptó la excusa. Esta es otra de las razones por las que la víctima no presentará pruebas.
Testigos de los procesados
En el octavo día de audiencia, ayer arrancó la presentación de los testigos de los procesados. El primero en presentar los testimonios fue el abogado Diego Chimbo, defensor de Blanca Fueres, dueña de la clínica de rehabilitación a donde habría sido llevado Romo y después asesinado.
Se presentó un peritaje sicológico de uno de los testigos de la Fiscalía. También se llamó a un interno de la clínica que negó conocer a Romo, a diferencia de los testimonios presentados por el fiscal Andrés Cuasapaz.
También estaba previsto que dé su testimonio el exministro del Interior José Serrano. Él fue convocado por uno de los procesados. A diferencia de otros casos, sí acudió. Estuvo en la sala de espera junto con sus asesores, pero la audiencia se suspendió y no fue interrogado. (AGO)