Redacción QUITO
Después de más de un año que se llamó a juicio a Pedro Delgado, primo del expresidente Rafael Correa, hoy se dará la audiencia de juzgamiento en su contra.
Este juicio es por enriquecimiento ilícito, por unos fondos no justificados de Delgado cuando era gerente del Banco Central del Ecuador.
Delgado está prófugo en Estados Unidos, con una sentencia por peculado a ocho años de cárcel. Sin embargo, el delito que se le imputa en este juicio sí se puede juzgar en ausencia del procesado.
Durante su alegato inicial, la fiscal general encargada acusó de autor directo y mediato a Delgado del delito de enriquecimiento ilícito. Según la prueba testimonial y documental dijo que Delgado no justificó un monto de 394.427,97 dólares.
Ese perjuicio se identificó con un examen especial de Contraloría, en el período del 1 de mayo de 2009 al 31 de julio de 2012, en el que se analizaron cuatro declaraciones juramentadas presentadas por Delgado al inicio y fin de gestión como asesor de Presidencia y presidente del directorio del Banco Central.
Además, según la pericia financiera contable, se verificó que Delgado tuvo ingresos no justificados en sus cuentas por 58.320 dólares en el Banco Rumiñahui y 99.652,68 dólares en el Banco del Austro. Además, un monto no justificado de pasivos por 236.455. En total, sus pasivos fueron de 426.400 dólares, de los cuales, según Delgado había recibido un crédito del Austro Bank Overseas Panamá de 379 mil dólares, pero en realidad fue de 189.945 dólares. Dentro de esos pasivos está la compra de una propiedad en Miami, Florida, por un monto de 385 mil dólares.
En sus alegatos finales, la fiscal solicitó una sentencia condenatoria, una multa, la reparación integral por 394.427,97 dólares y el comiso de sus bienes.
Por su parte, la Contraloría, a nombre del Estado sostuvo que Delgado «transgredió los principios que rigen la administración pública» y que «conocía la ilicitud de sus actos». Por esto, pidió que se le imponga el máximo de la pena establecido en el Código Penal, que va entre dos y cinco años de cárcel, que se le comisen los bienes de sus cuentas bancarias y su casa en Miami. También pidió que se reconozca al Estado 777.855,94 dólares, que es el duplo del incremento patrimonial injustificado. (AGO)
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