Fiscal General (e): ‘La patria necesita un baño de verdad’

Ibarreño. El fiscal Paúl Pérez tiene 42 años e inició su carrera judicial como asistente de fiscal.
Ibarreño. El fiscal Paúl Pérez tiene 42 años e inició su carrera judicial como asistente de fiscal.

Paúl Pérez, fiscal encargado, plantea una lucha frontal al crimen organizado. Para ello propone una unidad nacional especializada.

Redacción IBARRA
Edwin Paúl Pérez Reina, Fiscal General del Estado (encargado), después de un acto de reconocimiento de la Universidad Técnica del Norte (UTN), donde fue docente, tomó su sencilla mochila, se sentó en una de las butacas que lucían vacías y accedió a una entrevista con La Hora.

En su diálogo utiliza un lenguaje preciso y sincero. Nunca duda en expresar lo que hará como Fiscal General hasta cuando esté en el cargo, que pueden ser meses. Ibarreño de 42 años, estudió la primaria en La Salle, la secundaria en el San Francisco y se graduó de abogado en la Facultad de Jurisprudencia de la Universidad Central del Ecuador. Inició su carrera judicial como asistente de fiscal.

¿Qué tan complicado es combatir el crimen organizado en un país como Ecuador?
Como fiscales de carrera conocemos cómo el crimen organizado en el mundo ha ido creciendo. Tenemos los datos de que estas estructuras crecen en un 5% al año. Los Estados necesitan fortalecerse en el ámbito de la justicia penal. Están en la obligación de dar respuestas sólidas y contundentes frente a estos fenómenos criminales. Esto significa que el narcotráfico, el lavado de activos, entre otros, están conectados con temas de terrorismo como lo que hoy estamos viviendo en el país.

¿Cuál sería entonces la primera decisión que como Fiscal ha tomado para combatirlo?
La creación de la Unidad Nacional Contra el Crimen Organizado Trasnacional. Esto significa que en primer lugar el Estado debe dar seguridades a nuestras autoridades locales en las provincias de frontera. Un segundo aspecto es que esta clase de delitos se los debe investigar desde un ámbito centralizado, en Quito. Actualmente han sido designados seis fiscales nacionales y uno de ellos será el coordinador de esta unidad. Además, la norma para los fiscales es más flexible. El Código Orgánico Integral Penal (COIP) permite que los fiscales puedan hacer sus investigaciones fuera de sus actuaciones territoriales. Además se dotará de tres coordinadores zonales (uno por cada zona) aparte del jefe nacional, quienes articularán las acciones con los fiscales de las provincias.

¿Habrá mayor seguridad y reserva de la información?
Este proyecto dotará de mayor seguridad para los funcionarios y los fiscales. Permitirá mantener en reserva la información que llevan conjuntamente con la Policía Nacional, que ya designó a los agentes investigadores que acompañarán en las indagaciones. De esta manera el crimen organizado no tendrá la posibilidad de contactarse con los fiscales nacionales, porque no están cerca de su medio de acción.

¿La actuación será de inmediato?
Los fiscales nacionales este momento ya tienen casos en sus manos. Uno de ellos es la detención de los tres supuestos familiares del alias ‘Guacho’.

Se ha coordinado con los Estados vecinos, pero ¿qué alcance tiene esta iniciativa ecuatoriana?
El proyecto es integral y binacional. Con Colombia tenemos canales directos de comunicación, hemos realizado investigaciones conjuntas y se han propuesto equipos conjuntos de fiscales y policías. Hay acuerdos con las fiscalías de América Latina para mantener esta práctica permanente. Esto significa que las autoridades tendremos comunicación directa.

Usted fue fiscal de Carchi, una zona fronteriza, ¿cuáles son los casos que más debe preocupar a la Fiscalía?
Es evidente que existe la ausencia del Estado en estos sectores, porque muchas veces tenemos autoridades que son designadas a la frontera y lamentablemente pueden ser penetradas por las bandas criminales. En estas convivencias puede suceder una contaminación.

Usted es el reemplazo temporal de Carlos Baca Mancheno, quien fue destituido mediante un juicio político. ¿Qué acciones distintas a su antecesor propone Usted?
Mientras esté como máxima autoridad de la Fiscalía, propondré a la Asamblea una Ley orgánica contra el crimen organizado, que permitirá sentarnos en la mesa a todas las instituciones del Estado, la Unidad Financiera del Estado (UAF), el SRI, el Servicio Nacional de Aduanas, el Consejo Nacional de la Judicatura. A través de esto, queremos invitar a los jueces de trayectoria y experiencia para plantear reformas al COIP de manera urgente.

El crimen organizado no es de hoy. ¿Por qué cree que antes no se creó una unidad para combatirlo desde el Estado?
Nosotros lo hemos propuesto desde el 2015, pero lamentablemente no nos han escuchado. Creo que no hubo autoridades que aceptaron un proyecto de mucha trascendencia. A parte de que la ley que ahora proponemos crea jueces penales, plantearemos una reforma sobre los crímenes como el lavado de activos e incluir la extinción del domino. Éste último es uno de los temas que se ha enviado a la Asamblea, pero no hemos tenido una respuesta.

Usted mencionó, en uno de sus discursos, que los fiscales están dispuestos a entregar la vida para combatir el crimen organizado y la corrupción ¿Tan grave está la situación?
Los fiscales están enfrentando de manera directa la criminalidad. Tenemos muchos compañeros que han sido asesinados, hay otros que han sido objeto de atentados y amenazas. Solo para recordarle al país: cuando se investigó el caso Caranqui, en momentos en que construía su imperio en Imbabura y en el país, los fiscales que participamos en esa investigación recibimos muchas amenazas de muerte. Hubo compañeras que tuvieron que cambiarse de domicilio. Esta es una información de la cual la sociedad no tienen conocimiento.

Sobre corrupción, se comenzó a fiscalizar, investigar y sancionar después de una década. ¿Cree que el problema es más grave de lo que el país esperaba?
Vemos que ninguno de los Estados de Latinoamérica ha estado libre de corrupción. El caso Odebrecht ha involucrado, mediante contratos multimillonarios, a varias autoridades.

El fiscal provincial Gen Rhea, quien también fue designado antes como Fiscal General, estuvo presente en su homenaje. ¿Cómo sintió el abrazo que él le dio?
Tenemos una rectitud de corazón en todo lo que hacemos. No tenemos apasionamientos ni tampoco necesitamos perseguir a nadie. Nuestra actitud es sincera, sana, y creo que los abrazos pueden venir de todos los ciudadanos, porque no puedo negar la amistad a nadie. (CHRW)

FRASES

Estamos dispuestos a entregar la vida si es necesario para combatir la corrupción y la criminalidad”.En las fronteras hay evidente ausencia del Estado para resolver los problemas sociales, de educación, seguridad y legales”.