Dique minero que reventó en Brasil tenía problemas de drenaje

La alcaldía de Pará de Minas, a unos 40 kilómetros de Brumadinho, declaró este martes el estado de emergencia debido a la contaminación del río. Foto: AFP
La alcaldía de Pará de Minas, a unos 40 kilómetros de Brumadinho, declaró este martes el estado de emergencia debido a la contaminación del río. Foto: AFP

Río de Janeiro, Brasil AFP

El dique que reventó en Brasil el pasado 25 de enero dejando 142 muertos y 194 desaparecidos tenía problemas de drenaje, según un certificado de estabilidad que fue presentado a la compañía Vale, a quien la justicia obligó a suspender sus actividades en una de sus minas principales.

Varios medios brasileños publicaron extractos del certificado de estabilidad redactado el pasado septiembre por la empresa alemana TÜV SÜD, dos de cuyos ingenieros pasaron una semana detenidos junto a tres funcionarios de Vale, antes de ser liberados este martes.

El documento muestra, con el apoyo de varias fotos, que varios tubos de drenaje del dique de residuos mineros estaban parcialmente dañados y algunos «obstruidos por la vegetación».

La estabilidad de la represa fue sin embargo certificada, pese a que el informe de TÜV SÜD contenía una lista de recomendaciones que Vale debería haber seguido.

La minera brasileña alegó que había seguido todas las recomendaciones que eran «rutinarias» en este tipo de informes.

Este martes, el Tribunal Superior de Justicia (STJ) ordenó la liberación de los dos ingenieros de la compañía alemana, así como de los tres empleados de Vale que fueron arrestados el 29 de enero.

El STJ explicó que esas cinco personas «ya prestaron declaraciones» y que «no hay fundamentos» para sus detenciones, pese a la «gravedad de lo ocurrido y la conmoción social causada por la tragedia» de Brumadinho.

El 25 de enero, la rotura del dique de la mina de Córrego do Feijao, en el estado de Minas Gerais (sudeste), provocó un tsunami de lodo que arrasó con todo en su violento recorrido de más de nueve kilómetros antes de alcanzar el río Paraopeba, que ahora sigue expandiendo el barro en su lecho.

La alcaldía de Pará de Minas, a unos 40 kilómetros de Brumadinho, declaró este martes el estado de emergencia debido a la «contaminación» del río que es la principal fuente de captación de agua de esta ciudad de 100.000 habitantes.

La tragedia dejó 142 muertos y 194 desaparecidos, según el último balance provisional divulgado el martes por la Defensa Civil, que junto a los bomberos sigue trabajando en las difíciles tareas de búsqueda de los cuerpos entre una marea de lodo cada vez más dura e inaccesible.

Cierre provisional de la mina Brucutu

En tanto, otro tribunal brasileño determinó el lunes que Vale no puede almacenar más residuos mineros en ocho de estos depósitos.

La decisión implica el cierre provisional de la mayor mina de la compañía en el estado de Minas Gerais, la de Brucutu, cuya producción anual se estima en 30 millones de toneladas de hierro, un 7,5% de la producción prevista para 2019.

Vale afirmó en un comunicado que «todos los diques están debidamente licenciados y poseen sus respectivos certificados de estabilidad vigentes», y anunció que apelará la medida, considerando que «no existe fundamento técnico (…) que justifique la decisión de suspender la operación de cualquiera de esos diques».

La acción de Vale, que se hundió alrededor del 25% en la Bolsa de Sao Paulo al día siguiente de la tragedia, se recuperó un 8% cuando Vale anunció un plan de desmantelamiento de diez diques similares al de Brumadinho, que le llevaría a reducir su producción de mineral de hierro en un 10%; pero el lunes cedió un 3,39%, afectada por la decisión judicial.

Este martes, los títulos del gigante brasileño -primer productor mundial de mineral de hierro- cerraron con una ligera contracción del 0,09%.