Ambato ocupa el tercer lugar a nivel nacional en índice de pobreza

Situación. La pobreza se concentra en las zonas rurales.
Situación. La pobreza se concentra en las zonas rurales.

Según datos del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC), Ambato ocupa actualmente el tercer lugar de las ciudades en el país con el mayor índice de pobreza con el 8,4%, superada por Guayaquil con el 9,9% y Machala con el 8,6%, mientras que la urbe con el menor registro es Cuenca con el 4,2%.

En Ambato la pobreza se redujo un 2,9% desde diciembre del 2017 hasta diciembre del 2018, mientras que el índice de pobreza extrema es de 2,1%.

En el estudio se considera a una persona pobre si percibe un ingreso familiar per cápita menor a 84,79 dólares mensuales, mientras que pobre extremo es aquel que percibe menos de 47,78 dólares.

Situación

En la ciudad la cifra de pobreza pasó del 11,3% en diciembre del 2017 a 8,4% en diciembre del 2018, uno de los porcentajes más bajos desde 2015, sin embargo, Ambato se mantiene entre las ciudades más pobres del país.

Según los datos publicados por el INEC, a diciembre del 2018 la pobreza a nivel nacional se ubicó en 23,2% y la pobreza extrema en 8,4%. En el área urbana la pobreza llegó al 15,3% y la pobreza extrema a 4,1%. Mientras que en el área rural la pobreza alcanzó el 40% y la pobreza el 17,7%.

Criterios

Para el economista Eduardo Medina, esta situación se debe a la falta de oportunidades de empleo y también a la frágil situación del país.

“Acabamos de pasar 10 años muy complicados con el gobierno anterior, actualmente estamos saliendo de ese bache y generando confianza”, dijo Medina, quien aseguró que es muy importante apoyar al crecimiento de la empresa privada como una fuente de empleo fijo.

Necesidad

En el centro de la ciudad se puede observar a varias personas que se dedican al comercio informal, una de ellas es Elvira Criollo, quien con un par de baldes llenos de tomates y papas sale a ganarse la vida.

LA CIFRA
23,2%

es el índice de pobreza a nivel nacional.
Por lo que vende no gana mucho, pero el dinero le sirve para comer y poder trasladarse hasta su casa en Quillán, “a veces nos toca vender demasiado barato porque no hay quien compre, a veces no se gana nada”, dijo Elvira.

Delia Cunalata, aseguró que hace tres meses se dedicaba a vender caramelos, chicles y tabacos en el centro de la ciudad los fines de semana, labor en la cual no lograba recaudar dinero suficiente para mantener a sus hijos.

Actualmente, Delia optó por el comercio de habas, chochos y otros productos en el centro de la ciudad, actividad con la cual aseguró que genera más dinero para sus necesidades diarias. (RMC)