Quito, EFE
Al menos quince ríos de Ecuador se encuentran este viernes en umbrales de alarma tras las lluvias que se han producido en las últimas horas, lo que ha aumentado sus cauces, en algunos casos, hasta tres metros, informaron diversas instituciones de gestión de riesgos.
El ingeniero Carlos Cárdenas, del Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología (Inamhi) del país andino, confirmó que tienen monitoreados un total de once ríos que se encuentran en umbrales de alarma, aunque destacó que los niveles están bajando en la mayoría de ellos.
Estos once cauces fluviales se sumarían a otros cuatro: tres en las proximidades de la ciudad andina de Cuenca, y otro en las inmediaciones de Gualaceo, ambas en la provincia de Azuay (centro-sur), según diversas entidades de riesgo.
Cárdenas apuntó que en el caso de la cuenca hidrográfica de Napo -la más afectada por las lluvias- los cauces se han incrementado tres metros de media.
Ayer, un puente de esta provincia que cruzaba el río Guango, que une las localidades de Papallacta y Baeza, fue arrastrado por la corriente, dejando la vía cerrada y afectando a un vehículo que se encontraba transitando por la carretera en ese momento.
También hubo que lamentar la muerte de una persona cerca de Baños de Agua Santa, en Tungurahua (centro), que fue arrastrada por la corriente del río Ulba, el cual también arrastró un puente a su paso.
Los ríos que más preocupan ahora mismo son el Quijos, en la provincia amazónica de Napo, y el Tomebamba, que cruza la urbe de Cuenca, la tercera más grande del país andino.
Las autoridades también están pendientes de la situación del Santa Bárbara a su paso por la localidad de Gualaceo, ya que, según el Sistema Nacional de Gestión de Riesgos y Emergencias (SNGRE), el río se ha desbordado.
Los datos de Inamhi dejan en umbral de alarma a los ríos Apaquí, en la provincia del Carchi -fronteriza con Colombia-, Napo y Jatunyacu, en la provincia de Napo, Cebadas, en la provincia de Tungurahua, y Paute, Zamora y Santiago, que pasan por varias provincias del sur del país.
Según la institución, la crecida de estos ríos podría afectar a una veintena de poblaciones y asentamientos cercanos a sus orillas. El SNGRE evaluará las condiciones de los quince ríos para emitir las acciones correspondientes, aunque ha recomendado a la ciudadanía que permanezca atenta al comportamiento de los caudales y a los pronósticos meteorológicos de las próximas horas.
