Las reacciones sociales son respuesta a situaciones de un entorno. Michael Sandel profesor de Harvard y filósofo reconocido, dice que la meritocracia no es solución para el manejo de las sociedades, porque en la realidad las oportunidades no son iguales para todos.
Sandel subraya, “las élites políticas y meritocráticas olvidan que la mayoría de la gente no tiene un título universitario”, esto subyace en una actitud ante el éxito que, “lleva a dividir a las personas en ganadores y perdedores”. Estos asertos subrayan claramente dónde nacen los problemas actuales, que a su vez proyectan tendencias a buscar redentores que demagógicamente ofrecen soluciones.
Las elecciones nacionales indican que el país tiene una tendencia a la ‘izquierda’, en al menos un 70%, sumando Arauz, Yaku y Hervas que fluctúa del centro a la izquierda, lo que explica una sociedad buscando desesperadamente soluciones a sus problemas y eligiendo cualquier ilusión, probando que la estructura social no tiene balance normal. Las fichas políticas están en la encrucijada, porque Lasso de ser el segundo, tendría que afinar muy certeramente su discurso para poder lograr el éxito. De allí que el candidato piense que de no ser él, apoyará al otro segundo, pero hay que tomar en cuenta que en ese otro conjunto están los miembros del antiguo MPD, los comunistas más recalcitrantes y dogmáticos, de tal forma que el panorama no es muy claro para abril.
La verdad es que para cualquier candidato que alcance la meta no hay un escenario fácil, tanto por la economía, como por la intrincada red de creencias políticas que entrarán al ruedo de inmediato y, como siempre, quien gane estará atado de manos sin una mayoría en la Asamblea; como no existe coherencia ideológica vendrá la necesidad de reparto de favores, volviendo al principio de los tiempos.