Voto femenino: de privilegio a obligación moral

Ecuador conmemora el 9 de junio el Día Nacional del Voto Femenino
Ecuador conmemora el 9 de junio el Día Nacional del Voto Femenino

1924 fue un año histórico para los derechos de la mujer en la región. Matilde Hidalgo, pionera del voto femenino en Latinoamérica.

En pleno siglo XXI es casi impensable que una mujer tenga que mover cielo y tierra para poder expresar su voluntad política en las urnas. El debate actualmente es si queremos ir o no a votar el 7 de febrero y no porque se quiera hacer un aporte patriótico sino por necesidad de la papeleta que sirve para realizar algunos trámites.

Muchos no sabemos todo lo que tuvo que pasar para que hoy, todas las mujeres de Ecuador y América Latina en general, puedan “simplemente” votar.

Fue en 1924 cuando una joven lojana cambió el rumbo de la historia latinoamericana, al convertirse en la primera mujer de la región que ejerció su derecho al voto luego de protestar firmemente porque las mujeres no eran tomadas en cuenta ni siguiera para sufragar, peor aún para ser representantes de algún partido político.

Matilde Hidalgo, es el nombre de la primera bachiller del Ecuador, primera médico, poetisa, activista y primera mujer ecuatoriana en ser electa dentro de una lid electoral.

Este logro estuvo marcado por un ambiente hostil, por parte de individuos que no estaban de acuerdo, pues argumentaban una supuesta falta de libertad de la mujer para decidir de manera autónoma, dependencia de sus padres o esposos e inclusive menor desarrollo intelectual, así lo recoge el texto “El sufragio femenino en Ecuador 1884-1940” de Mercedes Prieto y Ana María Goetschel.

Ante esos atropellos, Matilde Hidalgo pidió ser incluida en los padrones y luchó con la Constitución en mano indicando que “para ser ciudadano y poder ejercer el derecho al voto se requiere tener 21 años, saber leer y escribir” y ella cumplía con todos.

Matilde Hidalgo de Procel fue la primera ecuatoriana en obtener una licenciatura y doctorado en medicina. Además, fue la primera en ocupar un cargo electo.El suceso sacudió la esfera política y generó debate en una sociedad machista, que no podía concebir que la mujer vote en las elecciones presidenciales. Luego de muchos debates el Consejo de Estado, órgano garante de derechos, falló a favor de Matilde.

Gracias a su valor y su determinación hoy las mujeres pueden sufragar. Hoy tienen la opción de elegir, no solo presidentes, sino también si dan a conocer sus ideas y su postura política o se quedan en casa viendo al sufragio como una obligación, no como una oportunidad de cambio y un privilegio que aún les es negado a muchas mujeres. (KH)