La educación financiera inicia desde casa

REALIDAD. El manejo inteligente del dinero es una capacidad importante
REALIDAD. El manejo inteligente del dinero es una capacidad importante

Solo el 30% de los ecuatorianos tiene nociones básicas sobre temas como manejo de ingresos y gastos. El 70% de las personas gasta constantemente por encima de sus ingresos. No tienen noción sobre planificación hacia futuro.

La educación financiera es una habilidad indispensable para poder hacer un presupuesto y tomar decisiones inteligentes en el día a día. Esas decisiones incluyen la elección de un teléfono celular, las compras de víveres para la semana, tener ahorros para imprevistos o incluso en qué casos tiene sentido endeudarse o no.

Según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), solo el 30% de los ecuatorianos tiene nociones básicas sobre temas como crédito, ahorro, tasa de interés o manejo de ingresos y gastos. En este contexto, de acuerdo con la Red Financiera de Desarrollo, el 70% de las personas gastan constantemente por encima de sus ingresos y no tienen ninguna noción sobre planificación hacia futuro.

Lorena Mendoza, economista, comentó que, a pesar de que desde 2005, la OCDE recomendó que la educación financiera inicie lo más pronto posible y se incluya en el currículo de escuelas y colegios, se ha avanzado muy poco al respecto.

“No se lo ve cómo una prioridad para formar ciudadanos más independientes y con habilidades para emprender. Aumentar el presupuesto de la educación, sin mejorar la calidad de los contenidos y los enfoques, da como resultado pobres destrezas prácticas para la vida”, dijo.

Esta realidad hace todavía más importante la formación financiera desde casa, a través de claves sencillas que se puede ir aprendiendo desde los primeros años.

Entender que no todo es inmediato

Normalmente, cuando los padres van a alguna tienda con sus hijos siempre hay algo que les llama la atención y los lleva a querer comprar. Negarle rotundamente esa nueva compra puede ser un error. Existe una alternativa mejor y es decir que si lo quiere tendrá que esperar y anotarlo en su lista de deseos.

Un truco para que resulte divertido para ellos es convertir esta lista de deseos en un juego: tendrán que dibujar ese nuevo objeto, escribir su nombre y apuntar el precio. Al acabar cada mes podrá elegir una de las opciones anotadas en su lista de deseos.

El objetivo es que los niños aprenderán a priorizar y a reflexionar en cada compra. (JS)

Tips para comenzar en casa

1. Asignar una paga

Para evitar que los niños hijos empiecen a pedirte dinero de forma muy recurrente y se pierda la cuenta de cuánto se les ha dado, una buena estrategia es asignarles una paga cada semana o cada mes; y establecer con ellos cómo se la va a gastar. Eso les enseñará sobre la duración del dinero en el tiempo. A la par, también es importante que entiendan que si no les alcanza para comprar algo, se puede ir juntando una pequeña parte de la paga para alcanzar el objetivo a futuro.

2. Hablar sobre el presupuesto familiar

Una forma fácil de hacer entender a los niños que el dinero no es infinito es que le enseñes una estructura de gastos sencilla. Se puede hacer un dibujo en el que se separa los gastos mensuales más importantes por colores, por ejemplo: el azul para la alimentación, el rojo para el pago de la vivienda, el verde para el gasto disponible para juguetes y el amarillo para el gasto disponible para transporte.

De esta forma cuando el niño pida un nuevo juguete, se puede explicar que el dinero que queda este mes es para completar el color rojo ya que el verde está completado, por lo que habrá que esperar hasta el siguiente mes para que vuelva a estar disponible ese dinero.